La Comisión Nacional de Disciplina del Centro impuso un castigo a Motagua de nueve partidos sin poder jugar en el estadio Nacional y además con 100 mil lempiras, esto tras la tragedia de la final donde murieron cuatro personas.
El castigo recae sobre las Águilas porque era el club encagargado de garantizar la seguridad en el estadio y al final este mandato no fue cumplido al cien por ciento.
El factor determinante del fuerte castigo fue el fallecimiento de cuatro personas y los múltiples heridos que se registraron en el portón 11 del coloso capitalino.
La noticia fue oficializada a EL HERALDO por el secretario de la Comisión de Disciplina del Centro, Allan Pineda.
Sin embargo, Motagua tiene la opción de apelar el castigo y será la Comisión de Apelaciones la que determinará si se mantiene o no este castigo.
Motagua no podrá ser local durante las dos vueltas del próximo torneo Apertura 2017-18 (aunque no se especificó si partidos de Copa Presidente podrán incluirse en caso de ser home club) y deberá buscar canchas alternas para defender la corona de bicampeón y el proyecto tricampeonato.
La última vez que Motagua jugó todo un torneo fuera del Nacional fue durante el Clausura 2007-08, cuando tomó como cancha sede el estadio Marcelo Tinoco de Danlí (El Paraíso, oriente de Honduras), debido a reparaciones de la cancha del estadio capitalino.
En la actualidad, la Liga Nacional exige a los clubes a registrar dos canchas alternas cada torneo, por situaciones de emergencia o ajenas al fútbol. En ese sentido, Motagua ha optado por estadio Rubén Guifarro de Catacamas (Olancho, oriente de Honduras) y el Carlos Miranda de Comayagua (zona centro).
Habrá que esperar la reacción legal de Motagua, quien en las últimas horas dijo también a EL HERALDO que preparaba su defensa legal ante cualquier tipo de acusación o responsabilidad en la investigación que las autoridades hondureñas ya han comenzado tras la tragedia del domingo pasado.