TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Las autoridades del Banco Central de Honduras (BCH) publicaron esta tarde el Programa Monetario 2024-2025, en el que se proyectan las estimaciones de las 10 principales variables macroeconómicas.
Una de las variables más importantes es el Producto Interno Bruto (PIB), ubicándolo en el rango de 3.5%-4.5%, similar al 3.6% de 2023. De acuerdo con el análisis del Banco Central de Honduras, esas proyecciones estarán asociadas al dinamismo del consumo y de la inversión privado, así como al aumento en las exportaciones de mercancías y por una mayor ejecución de la inversión pública.
Añade que los factores internos que incidirán en el crecimiento del PIB destacan la recuperación en las exportaciones por la mayor demanda de textiles y arneses; el incremento de la inversión pública por la construcción de carreteras, puentes, complejos deportivos y energía; mayor inversión privada en los sectores industriales que están diversificando las exportaciones de bienes; mayores recursos para sectores productivos como micro, pequeñas y medianas empresas, los programas de vivienda con los fondos de inversión del BCH-Banhprovi.
La maquila se espera un crecimiento de 3.1% en 2024, superando la caída de -14.3% en 2023. Para sectores claves como el café, las proyecciones no son halagadoras al estimarse una caída de 165 millones de dólares en el valor exportado, asociado a la reducción de 500,000 sacos en el volumen comercializado en el mercado internacional. También se proyecta una caída en las exportaciones de camarón por la ruptura de las relaciones diplomáticas de Honduras con Taiwán y el bloqueo de México.
Entre los riesgos identificados destacan la reducción del impacto del cambio climático y la migración de la producción de café, la certificación de la producción de café y aceite de palma como requisito para exportar a Europa, reducir la pérdida de mano de obra, sobre todo en el área rural. También otro desafío es fortalecer el mercado cambiario ante la disminución del ingreso de divisas y crear condiciones resilientes ante fenómenos climatológicos adversos.
Otro indicador de importancia es la inflación estimada en 4%, con una ponderación de 1% por arriba o 1% por debajo, menor que el resultado del año anterior, que fue de 5.19%, y que de acuerdo con el BCH continuará desacelerándose. Ese comportamiento se explicará por la disipación de las presiones inflacionarias externas, los subsidios internos a los combustibles y a la tarifa eléctrica, la moderación en el ritmo de crecimiento en los precios de los alimentos y la adopción de medidas de política monetaria.
La meta de cobertura de reservas internacionales netas se mantiene en igual o mayor a cinco meses de importaciones de bienes y servicios, equivalente a 7,500 millones de dólares o 1,500 millones por mes.
En relación a las remesas familiares, se pronostica un crecimiento porcentual de 3% para 2024 en comparación a 2023, al pasar de 9,242 a 9,518 millones de dólares.
Otras variables
El Programa Monetario 2024-2025 considera que las finanzas públicas continuarán en una senda de sostenibilidad, anclada en la estabilidad y en la disciplina fiscal, sin sacrificar la inversión social y de capital, junto con una mayor eficiencia en la recaudación tributaria.
El déficit del sector público no financiero se estima por debajo del 3.9% del PIB.
El Banco Central anunció que seguirá con sus medidas de política monetaria, cambiaria y crediticia para mantener el valor interno y externo de la moneda nacional.