San Pedro Sula, Honduras.-La Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) mantiene en lista de espera a más de 1,110 proyectos de inversión, nacionales y extranjeros, que solicitaron el suministro eléctrico.
De la totalidad, unos 314 proyectos son comerciales, 791 residenciales y cinco industriales a nivel nacional, de acuerdo con datos oficiales obtenidos por este rotativo a través de la solicitud de información pública SOL-ENEE-1545.
La situación impacta varias zonas del territorio hondureño, con San Pedro Sula entre las áreas más afectadas, al registrar 88 proyectos comerciales, 52 residenciales y tres industriales sin energía asignada.
De acuerdo a expertos la inversión superaría los siete mil millones de lempiras.
El crecimiento comercial, residencial e industrial no se detiene, los inversionistas siguen apostando al desarrollo del país y construyen torres habitacionales, de oficinas y de usos mixtos, grandes urbanizaciones residenciales, plazas comerciales, ofibodegas, naves industriales, entre otros proyectos, sin embargo, la ENEE no ha tenido la misma evolución y hasta estos dos últimos años están haciendo algunas nuevas inversiones en subestaciones, que llevan su tiempo.
Debido a esto, hace muchos años, en Honduras se viven dos situaciones: inversiones que no se llevan a cabo porque la estatal no puede garantizar el servicio, y empresas que se atreven e invierten en transformadores, circuitos y líneas.
Esto último incrementa entre un 15 a 20% (mínimo) el costo total de la obra, aunque, en seguida, la ENEE les retorna esa inversión por medio de crédito en la factura del consumo de energía mensual.
Proyectos frenados
Walter Perdomo, alcalde de Villanueva, Cortés, informó que hay proyectos privados detenidos en este municipio porque la ENEE no puede brindarles el suministro.
“Tenemos cerca de cuatro mil viviendas en construcción y lo que más urge es el tema del suministro eléctrico ya que venimos de una crisis bastante fuerte de energía, que teníamos colonias enteras sin el servicio, ahorita que se ha liberado energía el municipio ha sido beneficiado con la generación”.
Perdomo detalló que, hasta hace poco, cinco proyectos urbanísticos estaban detenidos por la falta de capacidad de energía, pero ya recibieron el visto bueno de la ENEE para que puedan comenzar a comercializar las unidades habitacionales.
“Lógico si no hay energía se detiene todo este desarrollo, incluso hemos tenido procesos industriales grandísimos que han tenido que instalar sus propias fuentes de energía térmica y solar, porque la ENEE no tiene capacidad”, aseveró el edil.
El informe sobre clima de inversión en Honduras 2024 del Departamento de Estado de Estados Unidos señala que la inversión en energía sigue siendo un desafío para los futuros inversionistas.
“Las empresas privadas siguen informando de dificultades para conectarse a la red o para obtener permisos para generar su propia electricidad, y no se han adjudicado nuevas licitaciones significativas durante el año”, describe uno de los párrafos del informe.
Llaman a la ENEE a no comprometer el desarrollo
José Martín Chicas, empresario y directivo de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), declaró que la inversión privada debe ir acompañada de más inversiones en la red de energía eléctrica por parte de la ENEE.
“Creo que es importante que la ENEE revise el caso de San Pedro Sula y pueda asignar los recursos para acompañar el crecimiento tan importante de la Capital Industrial, porque lo que no se puede es parar ni comprometer el desarrollo y la eficiencia de la producción nacional”, sostuvo.
Señaló que inversionistas han tenido que hacer inversiones en líneas de conducción y transformadores para llevar energía de los postes asignados por la ENEE hasta el proyecto.
“No satanicemos el tema de las inversiones privadas en generación, pero hay que acompañarlo con mejoras en la transmisión y distribución, que toda la cadena permita costos competitivos, porque tenemos muchas fallas técnicas, muchos cortes y todo esto frustra el dinamismo”, recomendó.
La Ley de Industria Eléctrica permite las inversiones privadas en caso de que la ENEE no pueda dar respuesta. Aunque las autoridades aseguran que el tiempo de devolución se hace en un promedio de 24 a 36 meses, desarrolladores sostienen que el retorno de inversión tarda años.
Fabián Bown, expresidente de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), capítulo noroccidental, manifestó que en San Pedro Sula esta problemática tiene más de 15 años, es decir, que los proyectos se frenan o deben incluir en su presupuesto inversión en la red eléctrica por la incapacidad de la estatal.
La ENEE debe construir más subestaciones, nuevos circuitos, invertir en más transformadores, algo que en estos dos años se está haciendo pero que lleva tiempo y aun así es insuficiente, porque hay un rezago importante en inversión de más de 30 años.
Además, del constante crecimiento que hay en municipios como Choloma, Villanueva y San Pedro Sula, en donde los circuitos están más que saturados.
Brown añadió que los desarrolladores construyen líneas de transmisión que lleva 500 metros de largo hasta 10 kilómetros solo por dar un ejemplo.
“Es un efecto devastador para cualquier inversión comercial, residencial arriba de 20 casas, o el tema industrial, porque hay que invertir una fuerte cantidad de dinero en el tema eléctrico y la infraestructura eléctrica es muy cara. Se debe estar en base a los mismos requerimientos de la ENEE y la ENEE se desliga fácilmente diciendo, construya sus líneas”, afirmó
Brown explicó que, debido a esto, la pérdida de inversiones en Honduras es incalculable, porque muchos inversionistas se retiran antes de comenzar.
Solo en la zona norte, calcula que en un ciclo de dos años de construcción se pierden más de 3,000 millones de lempiras en nuevas inversiones por la falta de energía. “Y no le menciono la inseguridad jurídica y otros factores”, recalcó.
Gustavo Boquín, presidente de la Chico, calificó a la ENEE “como un muerto viviente” y que no se ha ido a la quiebra porque está amparada por el Gobierno.
“La ENEE mientras no se tecnifique y desde el director hasta el operario más básico sea un profesional de la energía capacitado, seguiremos teniendo los mismos problemas. La ENEE no nos permite abrir nuevos centros comerciales, nuevos proyectos habitacionales, nueva infraestructura porque no tienen la capacidad de generación o de transmisión adecuada a la necesidad de la población hondureña”, señaló.
Aunque reconoció el esfuerzo del actual gobierno en mejorar el servicio eléctrico, pero lamentó que no sea suficiente.
“Ya hoy nos está limitando el crecimiento de la economía”, criticó.
De su lado, Miguel Aguilar, presidente del Sindicato de la ENEE, informó que, durante 2023 por muchos meses, la ENEE no aprobó proyectos por capacidad de transformación a suministrar y en algunos casos, capacidad de potencia.
“Por ejemplo, en Santa Rosa de Copán, Villanueva y en algunos otros sectores había problema de capacidad, porque no aguantaban los transformadores”.
Señaló que, aunque el desarrollador privado invierte en nuevos circuitos, estos pasan a manos de la ENEE por esto, la empresa devuelve esa inversión en crédito en la factura, pero recalca que la devolución lleva tiempo.
El problema de San Pedro Sula es la falta de transformación de potencia y potencia firme.
Los municipios más afectados con el déficit de energía, por su constante desarrollo es Choloma, Villanueva y San Pedro Sula.