Tegucigalpa, Honduras.- El Centro Nacional de Despacho (CND) tiene claras las cifras de los requerimientos de energía eléctrica para 2025 y la disponibilidad en el sistema.
Al restar la potencia firme (1,736.16 megavatios) de la demanda esperada para el próximo año (2,101.73 megas), la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) requiere 365.57 MW para evitar racionamientos, sobre todo en la época de verano.
Ese diferencial de potencia firme aumenta a 575.74 megavatios cuando se incorpora el 10% de reserva requerida por el parque eléctrico (2,311.90 MW), equivalente a 210.17 megas.
Los fallidos procesos de licitación de los últimos años han limitado la posibilidad de incorporar más potencia firme al sistema eléctrico.
Un informe del Departamento de Planificación de la ENEE indica que la capacidad instalada de energía aumentó en megavatios al pasar de 2,972.4 a 3,240.9 megavatios entre 2022-2024, equivalente a 268.5 megas adicionales.
El problema es que los 201.8 megavatios de energía térmica incorporados en los últimos años no son suficientes para cubrir la demanda de mediano plazo.
El 28 de abril de 2021 el gobierno de Honduras anunció la licitación pública internacional de 450 megavatios, no obstante, el proceso no concluyó. En noviembre de 2023 la ENEE lanzó una licitación privada de 220 megavatios, sin embargo, el proceso fracasó.
Según el informe de la estatal eléctrica, la demanda máxima de energía fue el pasado 4 de abril al alcanzar 1,799.4 megavatios.
Opciones
La estatal eléctrica tiene menos de seis meses para encontrar solución al déficit de potencia firme estimada por el CND para 2025.
Salomón Ordóñez, asesor en materia energética del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), sostiene que una de las opciones que tiene la ENEE para cubrir la demanda de potencia firme en verano (marzo a junio) es el arrendamiento de equipo de generación térmica.
No obstante, considera que esa nueva generación debe comenzar a operar a partir de marzo de 2025. Ordóñez considera que la opción más viable para la estatal eléctrica es la contratación de motores diésel. Las necesidades de energía continúan, oscilan entre 150 y 300 megavatios.
Sin embargo, el asesor del Cohep advierte que los problemas de déficit de energía continuarán en 2026 y 2027. Confía que se concrete la licitación pública internacional anunciada por las autoridades de la ENEE para satisfacer la demanda de mediano plazo y lo idóneo sería incorporar tecnologías más baratas como el bunker para que entre en operación en 2028.
Miguel Aguilar, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (STENEE), explica que hay una serie de acciones adoptadas para mejorar la capacidad de transformación y, por ende, disponibilidad.
Añade que están a la espera que las hidroeléctricas públicas y privadas mejoren la capacidad de sus embalses y así disponer de mayor generación para 2025.
Según Aguilar, los racionamientos de 2024 han dejado lecciones a las autoridades de la ENEE para mejorar el plan de contingencia y así reducir los apagones que se registran en el verano.