TEGUCIGALPA, HONDURAS-. Aunque la práctica de la colocación de bonos o títulos valores por la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) no es nueva, en el próximo ejercicio fiscal se podrán renegociar los préstamos producto de sus emisiones en el 2017 y 2020.
EL HERALDO constató que en el artículo 223 del proyecto del Presupuesto General de Ingresos y Egresos de la República para el 2025 establece que “se autoriza a la Secretaría de Estado en el Despacho de Finanzas (Sefin) y a la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) a renegociar los préstamos reasignados producto de las emisiones de bonos soberanos emitidos por el gobierno en 2017 y 2020”.
Esta acción se realizará a un plazo no menor a 15 años, con un período de gracia en el pago de intereses hasta el 2027 y un solo pago de capital al vencimiento, subraya la disposición.
Entre 2017 y 2020, los bonos soberanos emitidos por la estatal eléctrica fueron de 700 y 600 millones de dólares, que resultaron para apoyo financiero.
En el caso del último (en 2020), la tasa de interés fue de 5.625% y vencimiento al 24 de junio de 2030.
En diciembre de 2023, la ENEE realizó tres subastas para la colocación de bonos por 6,000 millones de lempiras, sin embargo, adjudicó solo 1,050 millones de lempiras, equivalente al 17.50%.
El gerente interino del organismo autónomo, Erick Tejada, anunció que se emitirán por la estatal 9,500 millones de lempiras en bonos los días posteriores a la Semana Morazánica que se destinarán al pago de deuda flotante relacionada a los compromisos pendientes con los generadores privados de energía.
Autorizados
“No deberíamos de acudir a deuda, pero heredamos demasiados problemas; para este año tenemos autorizados por el Banco Central de Honduras 9,500 millones de lempiras de monto encajable porque genera más apetito en el mercado sobre todo para la banca local que es evidente que no van a comprar todos los bonos”, informó el gerente financiero de la ENEE, Johny Anderson.
Agregó que “tenemos otras estrategias a través de líneas y fondos de pensiones para poder cubrir los 9,500 millones de lempiras (en bonos), esperamos que la deuda con los generadores tenerla en la mínima expresión para el próximo año y ojalá no tengamos el impacto del mercado de oportunidad”.
Tanto la situación financiera de la estatal como sus altas pérdidas que indican problemas operativos han contribuido al poco interés de los inversionistas en la colocación de estos bonos, admitió la directora ejecutiva de la Asociación Hondureña de Productores de Energía Eléctrica (AHPEE), Génesis Rodezno en una entrevista concedida a EL HERALDO.
Sostuvo que “una situación financiera débil puede plantear dudas sobre la capacidad de la ENEE para cumplir con sus obligaciones financieras, incluidos los pagos de intereses y el reembolso del capital, lo que disminuye la atractividad de sus bonos como inversión”.
Desde la empresa privada consideraron oportuna la determinación de la institución responsable de la producción, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica en el territorio hondureño, pero aseguraron que estos bonos deben de tener óptimas garantías.
“El gobierno tiene que reconocer que si un banco va a invertir en un bono gubernamental tiene que pensar que le tiene que dar un rendimiento interesante, aunque siempre invertir en ellos su ponderación en el capital de los bancos es cero, o sea, la deuda del gobierno se considera como deudas de menor riesgo; si van a ser bonos encajables creo que eso aumenta el apetito”, declaró la directora ejecutiva de la Asociación Hondureña de Instituciones Bancarias (Ahiba), María Lydia Solano.
Deuda financiera
Un monto de 79,301.1 millones de lempiras a diciembre de 2023 refleja el saldo de la deuda (préstamos) de la ENEE que incluye capital e intereses en mora, representando un aumento del 5% en relación al saldo de cierre de 2022, de acuerdo con un reporte de Finanzas.
Indica que “esto se debe principalmente a la colocación de bonos en el 2023 por un valor de 1,153.4 millones de lempiras, además del incremento en 25% de los intereses moratorios, intereses al igual que comisiones vencidas y devengadas con respecto al 2022 que ascienden a L13,112.5 millones”.
“La deuda total de la ENEE esta mayormente constituida por convenios subsidiarios firmados con el gobierno que representan el 68.2%, convirtiéndolo en el principal acreedor directo de la empresa, lo cual es explicado principalmente por la colocación de los bonos soberanos emitidos y reasignados como préstamos a la ENEE que representan el 40%. Por otra parte, los bonos emitidos por la ENEE en el mercado doméstico representan el 22.9%”, detalla la Sefin.