NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.- La bolsa de Nueva York caía duramente el lunes, en un movimiento de pánico tras un derrumbe de mercados bursátiles en el mundo por temores de recesión en Estados Unidos y el fortalecimiento del yen.
El índice principal, el industrial Dow Jones, perdía 2,38%, el tecnológico Nasdaq bajaba 3,81% y el índice ampliado S&P 500 -referencia principal de los accionistas- caía 3,16% hacia las 14H30 GMT, en tanto las tasas de los bonos seguían en descenso.
La debilidad del mercado laboral en julio en Estados Unidos “señala que la Fed (la Reserva Federal, el banco central estadounidense) esperó demasiado para bajar sus tasas” de interés, estimó la firma Pantheon Macroeconomics, que destacó que el dato de empleo en Estados Unidos, principal detonante de la ola de ventas, se conoció dos días después de que la entidad decidiera mantener sin cambios sus tasas.
La Fed mantiene en niveles inéditos en más de dos décadas sus tasas de interés (en el intervalo de 5,25% a 5,50%), que había subido para enfriar la economía ante un elevado registro de inflación. Tasas de interés altas encarecen el crédito y desalientan el consumo y la inversión, reduciendo así presiones sobre los precios.
Todos los valores del Dow Jones estaban en rojo, mientras los papeles de gigantes tecnológicos como Alphabet, Netflix y Meta perdían en torno a 2,5% y hasta 4%.
“¡Se acabó la calma estival! Los mercados están en ebullición y los rendimientos de las obligaciones se derrumban por temores de recesión en Estados Unidos”, resumió Neil Shearing, de Capital Economics.
En Europa, las principales bolsas abrieron a la baja, lastradas principalmente por los valores bancarios y tecnológicos, siguiendo los desplomes registrados horas antes en Asia.
En las bolsas asiáticas, la caída de los índices fue mucho más acusada.
Tokio se desplomó. El Nikkei 225, su principal índice, que ya había caído un 5,8% el viernes, perdió un 12,4%, o 4.451,28 puntos, el lunes para cerrar en 31.458,42 puntos, batiendo su récord de pérdidas, que se remontaba al desplome bursátil de octubre de 1987.
Taiwán cayó más de 8% y Seúl más del 9%. Las bolsas chinas cayeron más moderadamente: el índice Hang Seng de Hong Kong cedió 2,13% en las últimas operaciones. El índice compuesto de Shanghái cayó 1,54% y el de Shenzhen 1,85%.
En América Latina, la bolsa de Sao Paulo, la mayor de la región, tenía a su índice iBovespa en caída de 1,44% a las 13H50 GMT.
En el mercado de bonos, las tasas de los papeles de deuda de Estados Unidos estaban en mínimos en más de un año (3,76% para los bonos a 10 años), reflejo de una alta demanda de estos títulos considerados seguros.
“El detonante: un informe sobre el empleo en Estados Unidos” publicado el viernes, que hizo caer “las acciones y los rendimientos de los bonos” en Wall Street, explicó Stephen Innes, analista de SPI Asset Management.
La tasa de desempleo estadounidense subió en julio más de lo previsto, hasta el 4,3%. Es la tasa de paro más alta en el país desde octubre de 2021.
El viernes, tras la publicación de los datos de empleo, el Nasdaq entró en zona de corrección con una caída de 2,43% a 16.776,16 puntos. Una corrección implica una pérdida de 10% desde el pico más reciente.
Otros factores detrás de la volatilidad incluyen la anticipación de una posible retaliación iraní tras la muerte de miembros de alto perfil de los grupos islasmistas Hamás y Hezbolá, atribuidas a, o asumidas por, Israel.
Para Peter Cardillo, de la consultora Spartan Capital, la debacle bursátil se debe a “una combinación de factores, entre el temor a una desaceleración de la economía estadounidense y la desactivación del carry-trade” de los fondos especulativos.
Estos fondos dejan de utilizar este mecanismo, que consiste en tomar crédito en yenes a tasa baja para invertir en activos de riesgos como las acciones del Nasdaq.
Ahora que el yen se fortalece y que el Banco Central japonés abrió la puerta a las subidas de tasas, “el dinero sale del mercado accionario, en particular en Japón”, destacó Cardillo luego de la caída de más de 12% del Nikkei este lunes.
A pesar de los temores de recesión en la mayor economía mundial, CFRA Research “continúa prediciendo un ‘aterrizaje suave’” de la economía, esto es, una desaceleración con caída de la inflación, sin recesión, señaló en una nota su jefe de estrategia de inversiones, Sam Stovall, quien indicó que agosto es históricamente un período de debilidad para las acciones.
Cardillo, incluso, hizo notar que “los datos de creación de empleo (en Estados Unidos) siguen siendo positivos”.