Preocupante rendimiento tienen los estudiantes del sur de Francisco Morazán
Los estudiantes de los municipios de Alubarén, Curarén y Reitoca reportaron preocupantes problemas en el desempeño en Español y Matemáticas. El Distrito Central los resultados en números desmejoran en grados superiores
En la Escuela Pablo Zelaya Sierra, ubicada en Ojojona, Francisco Morazán, los estudiantes reportan problemas de lecto escritura, mientras que en Matemáticas les cuesta realizar operaciones básicas.
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SABANAGRANDE, HONDURAS.- Después de hacer una larga fila para recibir las notas de su hijo, doña Helen Viviana Cruz salió sonriente del Instituto Técnico Francisco Morazán, ubicado en Sabanagrande, un municipio ubicado al sur del departamento que lleva el mismo nombre del centro educativo: Francisco Morazán.
Cargaba con mucho esfuerzo a su hija con su brazo derecho, cuya mano había perdido. Con el otro brazo guardaba las calificaciones de su vástago en una mochila que se estaba pelando por su constante uso.
La sonrisa de la mujer no desapareció, pese a que el calor en Sabanagrande apenas era tolerable y el sol entrecerraba sus ojos cafés. No desapareció ni siquiera cuando pidió a La Unidad de Datos de EL HERALDO Plus, que realizaba un recorrido por diferentes centros educativos, que leyera las preocupantes notas de su primogénito que cursaba el décimo grado.
“Yo no sé leer”, justificó, mientras decía que ella solo recogía las notas y luego le pedía a alguien que le dijera cómo había salido su hijo.
El adolescente se había quedado en cuatro asignaturas: Biología, Psicología, Química y Matemáticas. En la última materia apenas había alcanzado 47 puntos, lo que le daba un promedio anual, según el documento que le extendieron en el centro educativo, de 12.
Sabanagrande es uno de los 25 de los 28 municipios de Francisco Morazán donde se aplicaron pruebas de rendimiento de Español y Matemáticas a estudiantes de tercero, quinto y octavo grado.
En ese punto geográfico los estudiantes de quinto grado obtuvieron el mejor puntaje en Español, mientras que en octavo sacaron una calificación de “debe mejorar” (obtuvieron 295 puntos).
En las evaluaciones numéricas ocurrió prácticamente lo mismo, aunque la realidad es que los resultados en este municipio apenas están por encima de la media departamental, donde los alumnos de los tres grados obtuvieron 263 puntos en Español y Matemáticas, solo un punto por encima del promedio nacional (fue de 262).
Los municipios de Alubarén, Reitoca y Curarén, según muestra el informe “Cuánto se dejó de aprender” en 2022 de la Secretaría de Educación y el Instituto de Investigación y Evaluación Educativas y Sociales de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), aparecían en números rojos con los resultados obtenidos, lo que significa que los estudiantes que reportaron mayores deficiencias en ambas materias viven en el sur de Francisco Morazán.
El rendimiento educativo en Francisco Morazán cayó 12 puntos de 2017 a 2022, pues en el primer año los estudiantes sacaron 275 puntos y en el segundo 263. Esta cifra está por debajo de los reportes de Cortés, el departamento que alberga la capital industrial de Honduras (San Pedro Sula), donde los educandos sacaron 264 puntos.
En un recorrido por algunos de municipios de Francisco Morazán, EL HERALDO Plus evidenció los problemas en los centros educativos en estas materias, donde los mismo docentes alegaron que se debía al desinterés de los padres y estudiantes, aunque otros también lo acreditaron a la falta de formación y especialización de los mismos maestros.
Rendimiento cayó
“Siempre me ha dado problemas en matemáticas”, confesó doña Helen cuando le mostró las notas de su hijo al equipo de EL HERALDO Plus. Además de la clase de Biología, en Matemáticas su puntaje no llegaba ni a la mitad del promedio impuesto por Educación para pasar cada parcial.
“Como yo no sé leer, yo siempre buscaba que me le enseñaran, buscaba a una muchacha que vive con un primo mío”, contó con un tono más serio, mientras su hija, a quien había sentado en una acera, se levantaba para sostenerse de sus piernas.
La mujer comentó que su hijo cursó el noveno grado en otro centro educativo donde no hay docentes especializados, es decir, un solo maestro le impartía todas las clases. En el Técnico Francisco Morazán ocurre todo lo contrario.
“Yo le digo que se ponga a estudiar, que si le han dejado tareas que las haga y que repase lo que ha visto para que él saque lo que quiera sacar”, mencionó.
Aunque el rostro de la hondureña era sonriente, quizás por la pena de ser entrevistada por EL HERALDO Plus, dijo sentirse descontenta por las calificaciones de su hijo. Los rostros de otros padres que salían del centro educativo eran serios, como si a muchos no les había ido bien en sus asignaturas.
Sabanagrande reportó un bajo desempeño educativo, especialmente en Matemáticas, sin embargo, a solo una hora con 12 minutos de allí está Alubarén, otro municipio de Francisco Morazán, registró puntajes preocupantes.
Solo el municipio de Alubarén obtuvo el peor rendimiento en tercero y quinto grado en Español, mientras en Matemáticas, con 221 puntos, fueron los estudiantes de tercer grado.
Reitoca, que está a 12 minutos de Alubarén, también apareció entre los municipios donde los estudiantes de quinto grado obtuvieron una calificación de “debe mejorar”, pues sacaron 286 puntos en comprensión lectora y escritura.
En octavo grado, Curarén es el municipio con menor desempeño en esta materia y Matemáticas.
Santa Ana, por su parte, reportó el puntaje más bajo a nivel departamental en las evaluaciones de los estudiantes de quinto grado en operaciones numéricas, con 189.
Al ver estos números observamos que los municipios del sur de Francisco Morazán, justo donde se ubica el corredor seco, reportaron los indicadores más bajos en cuanto a rendimiento académico. Aquí hablamos de comprensión lectora, vocabulario y tipos de texto, mientras que en Matemáticas evaluaron numeración, división multiplicación y operaciones combinadas.
Problema que se arrastra desde básica
Mientras el equipo de EL HERALDO Plus pasaba por el casco urbano de Ojojona se encontró con el centro educativo Pablo Zelaya Sierra, donde los padres se acumulaban en el portón para dejar a aquellos pequeños cuyas mochilas eran más grandes que sus cuerpos.
Una mujer estaba adentro impidiendo que los progenitores de esos niños pasaran. Incluso, cuando este equipo solicitó hablar con la directora pidió que se esperara afuera para pedir autorización. Minutos después salió y permitió el ingreso.
La directora, Rosa Angélica Rodas Valladares, una mujer de tez trigueña y ojos oscuros, no recordaba si esa escuela había sido parte de los 278 centros educativos de Francisco Morazán donde en 2022 se aplicaron la pruebas, pero afirmó que todos los años les hacen evaluaciones a los educandos para medir su rendimiento.
Algunos salen bien, otros obtienen un nivel intermedio, pero también reportan casos en los que la situación en preocupante. “Las clases de Español y Matemáticas son las clases esenciales y básicas. Todo radica desde primer grado, primer grado es la base en educación básica”, justificó.
“¿Qué tenemos?”, preguntó de forma inmediata, mientras respondía que los “alumnos que vienen de hogares con mucho uso de tecnología, irresponsabilidad de los padres en su atención a las necesidades, el apoyo en tareas. Esos son factores que hoy están haciendo que el rendimiento en Español y Matemáticas de nuestros niños estén bajos”.
La maestra, quien en diálogo con EL HERALDO Plus lamentó que en 2023 tuvo 24 estudiantes reprobados, mencionó cada una de los problemas internos y externos que afectan el rendimiento de los 595 niños matriculados en ese centro educativo.
Desde el descuido de los padres, la falta de interés en los niños, hasta la falta de apoyo gubernamental con materiales didácticos o la facilitación de docentes especializados influyen, según la profesora, para que en las evaluaciones Educación diga que cada niño “debe mejorar”.
Por ejemplo, el informe dice que en Ojojona, también ubicado al sur de Honduras, los estudiantes de octavo obtuvieron los números más bajos en lectura y escritura, pero que en Matemáticas el problema se concentró en tercero y octavo grado.
“La base siempre va a estar en primer grado, porque la niña que no aprenda a leer y escribir, con fuerza va a tener debilidad en Español”, reiteró la docente.
Sobre el desempeño de los educandos en Matemáticas lamentó que los escolares tengan problemas con la lateralidad, la falta de libros, así como la capacitación docente.
“Hay docentes que manejan la metodología, pero es bueno ir innovando. A nosotros no nos han vuelto a capacitar así de lleno en matemáticas. Faltan más capacitaciones en cuanto a esa área. Y no solo capacitaciones, que den los insumos”, repitió.
La profesora, quien sacó documentos con el historial académico y médico de cada estudiante, dijo que “tengo bastantes docentes capacitados, pero ya el niño que tiene bastantes déficit, hay unos que tienen déficit en Español, pero en Matemáticas no”.
EL HERALDO Plus consultó con Julio César Cárcamo, Director Municipal de Educación en Ojojona, sobre el rendimiento educativo de los escolares en las pruebas aplicadas en 2022, pero dijo que todo lo manejaban desde la Departamental en la capital.
Mario Alas, investigador de la UPNFM, quien participó en la elaboración del informe, dijo que los datos evidencian que con la pandemia los estudiantes bajaron en cuanto a rendimiento educativo.
Afirmó que el país retrocedió al menos 10 años, lo que significa que la educación a nivel nacional cayó a niveles similares a los de 2014.
“En los países donde a los estudiantes no se les dieron libros de texto y cuadernos de trabajo, el cierre de la escuela impactó más. Los países que aunque mantuvieron cerrado el sistema, pero les dieron libros de texto, el aprendizaje que perdieron fue menor”, mencionó.
Estas declaraciones coinciden con la opinión de Gloria Trujillo, subdirectora del Centro Básico Gloria Figueroa, ubicado en Sabanagrande, quien afirmó que el material didáctico es vital para los conocimientos de los niños.
Denunció que en ese centro educativo ellos compran sus propios textos y piden a los padres que les saquen copias.
Dijo que en su caso ella trata de que los niños comprendan lo que les explica, sobre todo en Matemáticas. “Influye mi pedagogía, cómo la aplico; la cuestión económica y la salud de los estudiantes”, enumeró sobre las causas del bajo rendimiento de algunos estudiantes.
Alas, por su parte, enfatizó que “en Ciencias Naturales y Matemáticas el currículo de nuestro país hace mucho énfasis en memorizar o aprender algoritmos”, el problema es que los estudiantes no saben cuándo aplicar una suma, multiplicación y división. “Por eso en las pruebas la tendencia es que salimos mal”, condenó.
Con algunas excepciones, el informe mostraba un panorama desalentador, pero esos indicadores permiten ver cómo los estudiantes estaban en Matemáticas y Español, para buscar metodologías y soluciones para mejorar y no retroceder, como ocurrió de 2017 a 2022.
Además, reflejaba los municipios que destacaron en cuanto al mejor rendimiento educativo. En el caso de Francisco Morazán, aparecían los estudiantes del tercer grado en Santa Lucía, el quinto grado en la Villa de San Francisco y el octavo grado en Santa Ana, al menos en Español.
En Matemáticas los que obtuvieron mejor rendimiento fueron los educandos de básica en Nueva Armenia y en octavo grado sobresalió Marale, un municipio ubicado al norte de Francisco Morazán.
Esto, en pocas palabras, significa que mientras en el norte del departamento los estudiantes obtuvieron el mejor puntaje, en el sur los números dicen que cada escolar “debe mejorar”.