MADRID, ESPAÑA.- El presidente del gobierno español,
Pedro Sánchez, dejó entender este martes que fue el
rey Felipe VI quien empujó a su padre
Juan Carlos I al exilio, en razón de las sospechas de corrupción que pesan sobre el rey emérito.
'El gobierno y yo como presidente, manifiesta su absoluto respeto a las decisiones que ha tomado la Casa Real (...) de distanciarse de supuestas conductas cuestionables y reprobables' de un miembro de la familia real, declaró Sánchez en rueda de prensa.
El palacio real anunció el lunes la partida del antiguo jefe de Estado de 82 años mediante una carta de Juan Carlos dirigida a su hijo, en el que explicaba que abandonaba el país para facilitar al actual monarca a ejercer sus funciones ante 'la repercusión pública que están generando ciertos acontecimientos pasados de (su) vida privada'.
Felipe VI le agradeció la decisión, dijo el palacio.
El escándalo se remonta a 2018. En unas grabaciones publicadas por la prensa española, la examante del rey emérito Corinna Larsen (que también usa el apellido de su exmarido Sayn-Wittgenstein), aseguraba que Juan Carlos poseía c uentas secretas en Suiza y que habría cobrado una comisión por la concesión a empresas españolas de un contrato para la construcción de la vía férrea de alta velocidad entre La Meca y Medina, en pleno desierto, en Arabia Saudita.
La fiscalía anticorrupción conduce una investigación sobre este asunto desde diciembre de 2018. En junio la fiscalía del Tribunal Supremo, la única jurisdicción competente para eventualmente juzgar al antiguo soberano, anunció que asumía la investigación para establecer si existía delito y si podría ser imputable a Juan Carlos.
'Los medios han hecho su papel, han denunciado estas supuestas prácticas irregulares, los jueces y fiscales están actuando y (...) la Casa Real ha marcado distancias frente a estas supuestas, subrayo supuestas, conductas que pudieran ser irregulares', dijo Sánchez.
Al atribuir la decisión del exilio a la Casa Real, Sánchez confirmó la interpretación hecha por numerosos analistas, según quienes el antiguo monarca se habría visto empujado a partir.
'No es un rey que se huye. Es un rey que le echan', declaró a la AFP Abel Hernández, autor de varios libros sobre el rey.
Sánchez dijo desconocer a qué país se trasladó Juan Carlos, mientras que el palacio real tampoco ofrece información al respecto. Según varios medios, estaría en República Dominicana, alojado por un amigo, un adinerado empresario.
'El gobierno y yo como presidente, manifiesta su absoluto respeto a las decisiones que ha tomado la Casa Real (...) de distanciarse de supuestas conductas cuestionables y reprobables' de un miembro de la familia real, declaró Sánchez en rueda de prensa.
El palacio real anunció el lunes la partida del antiguo jefe de Estado de 82 años mediante una carta de Juan Carlos dirigida a su hijo, en el que explicaba que abandonaba el país para facilitar al actual monarca a ejercer sus funciones ante 'la repercusión pública que están generando ciertos acontecimientos pasados de (su) vida privada'.
Felipe VI le agradeció la decisión, dijo el palacio.
El escándalo se remonta a 2018. En unas grabaciones publicadas por la prensa española, la examante del rey emérito Corinna Larsen (que también usa el apellido de su exmarido Sayn-Wittgenstein), aseguraba que Juan Carlos poseía c uentas secretas en Suiza y que habría cobrado una comisión por la concesión a empresas españolas de un contrato para la construcción de la vía férrea de alta velocidad entre La Meca y Medina, en pleno desierto, en Arabia Saudita.
La fiscalía anticorrupción conduce una investigación sobre este asunto desde diciembre de 2018. En junio la fiscalía del Tribunal Supremo, la única jurisdicción competente para eventualmente juzgar al antiguo soberano, anunció que asumía la investigación para establecer si existía delito y si podría ser imputable a Juan Carlos.
'Los medios han hecho su papel, han denunciado estas supuestas prácticas irregulares, los jueces y fiscales están actuando y (...) la Casa Real ha marcado distancias frente a estas supuestas, subrayo supuestas, conductas que pudieran ser irregulares', dijo Sánchez.
Al atribuir la decisión del exilio a la Casa Real, Sánchez confirmó la interpretación hecha por numerosos analistas, según quienes el antiguo monarca se habría visto empujado a partir.
'No es un rey que se huye. Es un rey que le echan', declaró a la AFP Abel Hernández, autor de varios libros sobre el rey.
Sánchez dijo desconocer a qué país se trasladó Juan Carlos, mientras que el palacio real tampoco ofrece información al respecto. Según varios medios, estaría en República Dominicana, alojado por un amigo, un adinerado empresario.