Tegucigalpa, Honduras
Color, sabor y diversión son algunas palabras que podrían describir el ritmo garífuna en la música hondureña, la variedad de danzas y cantos que provienen del ritmo de esta etnia es una muestra de la riqueza musical que poseemos los catrachos.
Aunque este ritmo se vale de la ejecución de instrumentos sencillos como el tambor y la maraca, estos bastan para contagiar de movimientos a quienes lo escuchan.
La música y las melodías garífunas aúnan elementos africanos y amerindios, las letras constituyen una verdadera reserva de la historia y el saber tradicional de la cultura sobre temas como el cultivo de la yuca, la pesca, la fabricación de canoas y la construcción de casas de barro cocido.
Son canciones con un fuerte componente satírico que se entonan al ritmo de los tambores y se acompañan de bailes en los que también participan los espectadores.
Estas tradiciones siguen siendo esenciales en la vida de los garífunas.
Los ancianos son los encargados de perpetuar las ceremonias y fiestas como una forma de expresión que hoy todavía utilizan numerosas personas. La lengua, danza y música de los garífunas fueron proclamadas como obras maestras del patrimonio oral e inmaterial de la humanidad en el año 2001.
A lo largo de la historia de este legendario ritmo, decenas de artistas se han identificado con la música garífuna. Estas estrellas han destacado a nivel nacional e internacional y han ido propagando la esencia musical de Honduras.
Cómo pasar por alto a uno de los grandes artistas hondureños, Guillermo Anderson, quien con su música ha marcado un antes y un después en el país.
“Encarguitos del Caribe”, “Costa y calor” y “Pobre marinero”, junto a otras canciones, han integrado en sus notas musicales la riqueza garífuna, ritmo que ha sonado en Honduras y el mundo.
Esucha a Guillermo Anderson cantando El Encarguito:
Pilo Tejeda es otro cantante hondureño que han destacado por su música al ritmo punta, con una de las canciones lema de naciones enteras: “Sopa de caracol”.
Escucha a Pilo Tejeda y a Polache cantando Sopa de caracol:
Cuando la canción suena, el ambiente inmediatamente se enciende, no hay persona que se resista a este pegajoso ritmo, sin importar nacionalidad, edad, raza o sexo.
Pilo ha tenido algunas colaboraciones con otros artistas como Polache, quien también le ha dado la vuelta al mundo con su música y ha representado a Honduras en diversos eventos internacionales con sus interpretaciones.
El cantante integra en su repertorio instrumentos como el tambor y la maraca, que son propios de los garífunas en la ejecución de la punta
. La tendencia musical sigue haciendo eco en el país con este singular ritmo, algo que sin lugar a dudas nos llena de orgullo a los hondureños.
Cada vez la música toma más fuerza y cada año son más los artistas que llevan sus letras a otras fronteras y con ello el legado garífuna continúa cobrando importancia no solo a nivel nacional, sino internacional.