TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Ganador del “Shark Tank Estados Unidos”, en 2020, Juan Salinas es un ejemplo de lucha y tenacidad. El emprendedor catracho cuenta con su propia marca de snacks saludables llamada Perfect Life Nutrition, estos son distribuidos en Estados Unidos.
Tras ganar en este famoso reality show, Salinas tuvo la oportunidad de aliarse con Mark Cuban, un reconocido empresario e inversor estadounidense. “Shark Tank” es un programa en el que varios emprendedores presentan su empresa ante un grupo de inversionistas que deciden financiar su proyecto.
Juan Salinas tenía tan solo 16 años cuando emigró de Honduras y se estableció con una familiar cerca de la Universidad de Rutgers, en Nueva Jersey, Estados Unidos. Su madre soñaba con que Juan continuara con sus estudios, y así lo hizo el joven hasta conseguir un doctorado en Ciencias de los Alimentos, lo que le abrió las puertas en esa nación.
El hondureño trabajó para grandes multinacionales como Nabisco, Cadbury, Nestle y Kraft, sin embargo, en 2015 dejó su trabajo y fundó su empresa, Perfect Life Nutrition, para crear un snack saludable a base de maní, frijoles y arroz llamado P-nuff Crunch, que ahora tiene varios sabores.
El doctor Juan Salinas también fue el ganador del primer lugar del Concurso Anual de Planes de Negocios de Rutgers Business School en el año 2018. Ha sido invitado en numerosos podcasts y aparecido en cadenas importantes como Telemundo, Today Show y FOX Network TV, entre otras.
Salinas fusionó inteligencia y audacia, y supo combinar sus habilidades de desarrollo de alimentos con su pasión por un estilo de vida saludable.
“Cuando empecé, puse todo mi capital que había ahorrado por más 20 años, todo mi tiempo incluyendo fines de semana, y dejé de viajar y tener otras comodidades que normalmente tenía. Es importante también tener un sistema de soporte de la familia y amigos que te puedan alentar y dar consejos, especialmente cuando las cosas andan mal”, reveló hace un tiempo a la revista Buen Provecho.
Pero este hondureño no solo es un conocedor de la buena nutrición, también es un apasionado de los deportes. En Honduras, Salinas fue parte del equipo nacional de natación y en los Estados Unidos fue un profesional fisicoculturista.
Juan Salinas también es un hombre de fe. El hondureño ha admitido en varias entrevistas que Dios es una pieza fundamental en su vida, y que practica la religión católica desde que era un niño, pues creció en una familia muy devota.
“Crecí en una familia muy católica. ¿Sin Dios en mi vida? ¡Olvídate! hay muchos obstáculos y más de una vez creo que lo único que me ha traído hasta aquí es mi fe”, afirma.
