Tegucigalpa, Honduras.- Con un discurso firme sobre no ser una figura decorativa dentro del gobierno y luchar por los derechos de la mujer, María Antonieta Mejía, actual diputada nacionalista (2022-2026), busca convertirse en designada presidencial con el movimiento “¡Papi a la Orden!”.

“Cuando empecé en el Congreso Nacional y vi lo accidentado que era, fue impactante. No veía que todo marchara bien, presencié la usurpación de curules. Los que hoy son oficialismo, toda la saliva les ha caído en la cara”, expresó Mejía durante su entrevista este lunes en el programa “Hablemos de Política”, refiriéndose a su experiencia en el Legislativo y su salto en la política.

Insistió en que desde el Congreso ha logrado muy poco debido a la falta de oportunidades y aseguró que se ha sentido incómoda en su cargo. “Le he quedado a deber al pueblo hondureño porque quienes dirigen el Congreso Nacional no nos permiten actuar”, lamentó.

María Antonieta, quien acompaña en las elecciones primarias al precandidato, Nasry Asfura, reconoció que el cargo de designado presidencial ha pasado desapercibido en este y en gobiernos anteriores. Sin embargo, ella promete que de llegar a ganar no será una “figura decorativa”.

“Voy a enfocarme en que las mujeres recuperen su autonomía y su independencia financiera. Muchas están limitadas por el tema económico, pero si les das una oportunidad, pueden hacer maravillas. Dale el maíz y te hace una tortilla”, afirmó.

Señaló que el problema no es solo la falta de acceso al crédito para las mujeres, sino la falta de conocimiento sobre cómo invertir y duplicar sus ganancias.

“Nos vamos a ir por el sector social, dándole microcréditos a las mujeres y acompañándolas antes, durante y después del proceso”, explicó.

Otro de sus principales ejes es la educación. “Cuando hay una sociedad educada y culta, cuando fortalecemos esas capacidades, no hay robo, la gente tiene valores. Pero eso se hace desde la escuela”, sostuvo.

Sobre el cargo al que aspira, recalcó que “son las personas las que hacen los puestos” y que ella no será un simple adorno en el gobierno.

“No soy un florero que lo ponen de un lado a otro, prefiero hacerme a un lado antes de serlo. Soy una mujer que entiende mucho de política, no voy a ser una piedra de tropiezo, sino a generar espacios”, aseguró.

A tres años del gobierno actual, Mejía dejó claro que no replicaría nada de la actual gestión. “Ni siquiera el discurso de Xiomara Castro, que quedó en palabras vacías”, sentenció.

En cuanto a su alianza con Nasry Asfura, aseguró que el precandidato a presidente por el Partido Nacional “no es un hombre mediático, pero sí responde al pueblo”.

“En sus dos períodos como alcalde, no se le vio inaugurando ningún puente. Ese recurso que podría invertirse en actos protocolarios, él prefiere reinvertirlo en obras”, concluyó.