Tegucigalpa, Honduras.- La crisis electoral en Honduras no se quedó en las irregularidades del pasado 9 de marzo, cuando se desarrollaron las elecciones primarias.
A casi un mes de que se llevaron a cabo los comicios, el caos persiste mientras se analizan las actas en el escrutinio especial.
Este 26 de marzo, en medio del proceso de revisión, el consejero vocal del Consejo Nacional Electoral (CNE) y representante de Libertad y Refundación (Libre), Marlon Ochoa, fue recibido entre gritos y abucheos.
Pese a que el escrutinio especial es una etapa clave para definir los candidatos que representarán a cada partido en las elecciones generales, las disputas han escalado principalmente entre el Partido Nacional y Libre.
Tanto militantes nacionalistas como de Libre elevaron sus voces y comenzaron a gritar desde lados opuestos del recinto.
"¡No volverán, no volverán!", coreaban los seguidores de Libre, mientras que los nacionalistas respondían con "¡Fuera el familión, fuera el familión!".
El proceso de escrutinio especial cuenta con alrededor de 60 miembros por partido, quienes trabajan en jornadas de 24 horas divididos en dos turnos: el primero inicia a las 7:00 de la mañana y el segundo a las 7:00 de la noche.
El CNE informó que en este proceso se revisarán 28,861 actas de los tres partidos, ya que presentaban inconsistencias, como discrepancias con el dispositivo biométrico, errores en el balance o falta de firmas.
Una vez finalizado el proceso de verificación y escrutinio, el CNE deberá hacer la declaratoria oficial de los ganadores de las elecciones primarias el próximo 9 de abril, según lo establecido en la Ley Electoral.