TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El amor por ejercer el sufragio y continuar depositando confianza en los candidatos de su preferencia, hizo que doña
Inés Torres (78) y su esposo
Manuel Martínez (73) llegaran temprano a la
Villa Olímpica para hacer democracia.
Tomados de sus manos, ambos septuagenarios, llegaron al complejo deportivo para votar por sus candidatos de preferencia.
Por su parte, don Manuel, cuidando cada paso de su esposa, expresó que él era y será nacionalista, sin embargo aclaró que eso no les ha traído problemas en los 48 años que tienen de vivir juntos y ejercer el sufragio.
'Desde que tuvimos el derecho a votar, hemos votado', dice don Manuel, 'y esperamos votar en noviembre si el Señor presta vida', refuta su esposa.
Tomados de sus manos, ambos septuagenarios, llegaron al complejo deportivo para votar por sus candidatos de preferencia.
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'¡Yo soy liberal!', por siempre, exclamó doña Inés, mientras apoyaba sus manos sobre un andador para poder caminar por uno de los Gimnasios de la Villa Olímpica.
Por su parte, don Manuel, cuidando cada paso de su esposa, expresó que él era y será nacionalista, sin embargo aclaró que eso no les ha traído problemas en los 48 años que tienen de vivir juntos y ejercer el sufragio.
'Desde que tuvimos el derecho a votar, hemos votado', dice don Manuel, 'y esperamos votar en noviembre si el Señor presta vida', refuta su esposa.
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La pareja, quien tiene dos hijos y un nieto, se trasladó desde la Villa Universitaria hasta la casa de los deportes y ejerció el sufragio unida, pero no revuelta.