El próximo 12 de marzo Enrique Ortez Sequeira aspira a convertirse en el próximo presidente de Honduras con su movimiento “Unámonos”, una corriente que le abre las puertas a todo el liberalismo que en algún momento se sintió resentido con su propio partido. “Unámonos es volver a construir el Partido Liberal”, opina Sequeira.
EL HERALDO conversó con el aspirante a la presidencia de la República. A continuación sus declaraciones de cara a los comicios primarios.
¿Por qué el Movimiento Unámonos?
Esta corriente del Partido Liberal surge de una plática entre amigos que ve la realidad del ente político. Nace con la idea de brindar un discurso renovador. También es un llamado a unirse en contra de la delincuencia, el hambre, el desempleo y la falta de esperanza.
¿De dónde surge Kiquito?
Se lo debe a Carlos Roberto Reina, un gran amigo de su padre. Durante una conferencia de prensa él dijo 'ahora les hablará Kiquito' y así fue bautizado desde entonces.
¿Existe un sistema antidemocrático en Honduras?
En Honduras se escoge a los candidatos que menos votos sacan cuando el presidente es la figura que más votos debería sacar. Eso significa que es necesario hacer una recomposición de realidad política vs realidad electoral.
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¿A favor de las 2da vuelta en el país?
Sí y además se necesita transparencia evitando que hayan credenciales en blanco.
¿Cuáles son sus principales promesas de campaña?
-Llegar al estrato de personas desamparadas que no tienen medicinas ni oportunidad de empleo.
-Preparar a los niños ante la globalización a través de educación, salud y alimentación.
-A los jóvenes se les brindarán oportunidades para que puedan tener una casa digna y empleo. Además un financiamiento que les permita empoderarse.
-Impulsar el emprendedurismo.
-Crear para los adultos mayores una vejez digna.
-Un gobierno austero, transparente y menos corrupto.
-Eliminar los impuestos que ahorcan al país.
-Realizar una revisión a las privatizaciones para que el Estado abogue por el bien común.
-No “engolosinarse” con el poder de la nación.
-Retornar a un estado de derecho.
-Darle un rostro humano al gobierno.
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Villeda Morales
¿A qué le teme?
A la traición y la mentira.
Libro favorito: El Político, de Azorin
Hobbies: A Enrique Ortez le apasionan por las motocicletas, se considera “Harlero” de corazón y ha viajado a Costa Rica y Guatemala con su esposa en competencias de motocicletas. Enrique asegura sentirse “libre en la moto porque puede observar paisajes bellos y sentir la adrenalina”.
¿Una persona que haya transformado su forma de pensar?
Mi esposa María Isabel Caminales, ella es mi infinito.
¿Qué piensa de los políticos? Hay muchos buenos, pero hay más malos.
¿Qué opina del peaje?
El peaje es un atraco al pueblo hondureño. El estado debe dar un sistema de circulación gratuito. Aquí es un monopolio
¿Virtud? Saber perdonar.
¿Defecto? Impaciencia.
Frase con que le gustaría ser recordado: “Fue un hombre que se dejó querer”.
¿Qué iba a preguntarle a Juan Orlando Hernández el día que se paró en medio de la entrega del premio “Álvaro Contreras”?
“Presidente si usted quiere a Honduras dígale en este momento que no va a buscar la reelección”.
Conozca la vida de Enrique Ortez Sequeira...
Fecha de nacimiento: 23 de enero de 1959
Lugar de nacimiento: París, Francia
Nacionalidad: hondureño
Esposa: María Isabel Caminales (47)
Hijos: Enrique, Daniela, Diego, Marco Antonio e Isabella.
Creencias religiosas: católico.
Su familia: Enrique Ortez procede del matrimonio que una vez fue conformado por Enrique Ortez Colindres (85), su padre, e Hilda Eulalia Sequeira Castellón (75), su madre. Ambos se conocieron en la ciudad del amor -París-. Su progenitor era funcionario de la embajada de Honduras en Francia y ahí se enamoró de la hija del embajador de Nicaragua, con quien decidió formar un matrimonio.
Enrique es el mayor de cuatro hermanos, Eduardo, Karla Patricia y Paola con quienes posee una excelente relación familiar. A pesar de vivir separados por las fronteras, se comunican con regularidad.
Su regreso a Honduras: Cuando Sequeira tenía 12 años vivió una de las experiencias más traumáticas de su vida. En la década de los 70´s sus padres se divorciaron y junto a su mamá y hermanos se trasladaron a Managua, Nicaragua.
Específicamente el 23 de diciembre de 1972, Enrique y su familia fueron protagonistas de un fuerte terremoto. Decidieron abandonar la casa y salir corriendo a la calle para convertirse en partícipes activos del pánico que había desencadenado el sismo. Enrique vio de cerca como las casas se derrumbaban frente a sus ojos. Afortunadamente su familia salió ilesa de una tragedia que provocó la muerte de más de 19 mil personas y 20 mil heridos. El desastre los trajo nuevamente a sus raíces hondureñas.
Carrera educativa: Después de graduarse en el Instituto Salesiano San Miguel de Tegucigalpa en la promoción de 1976, Enrique ingresó a la facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) con el carnet 7710081. Al graduarse de abogado realizó un examen para convertirse en notario de la Corte Suprema de Justicia. Años más tarde cursó una orientación de derecho mercantil. Luego formó su propio bufete “Ortez Sequeira y Asociados”.Cargos: Fue miembro del Tribunal Nacional de Elecciones. También fungió como magistrado del Tribunal Supremo Electoral. Además fue regidor de la municipalidad de Tegucigalpa y Comayagüela, después de competir contra Ricardo Álvarez por la Alcaldía.
Faceta como magistrado: Enrique Ortez fue electo magistrado en mayo de 2009 y en junio de ese mismo año se produjo un golpe de Estado en Honduras. Según el propio Enrique ese fue uno de los 'momentos más difíciles en donde estuvo en juego su vida y el proceso democrático'. “Las elecciones fueron esa ruta que empezó a abrir y a juntar un pueblo hondureño dividido y que necesita seguir entendiendo que el proceso democrático es el que puede sanar las heridas”, expresó.
