Al final de un día largo, Ulisses vuelve a su hogar en bicicleta y cumple un ritual sagrado de limpieza. 'Llego a casa, me saco la ropa, entro al baño, me ducho y lavo mi ropa. Sólo después de eso, voy a abrazar a mi hija y a mis nietas', cuenta Ulisses, cuya esposa se mudó temporalmente a otro lugar para no contraer el virus. 09/05/2020 - 04:05