Pese a las críticas de jugadores como Laporte, Arabia Saudi no se detiene. Según informa el periodista Ben Jacobs, ya preparan una desorbitada inversión de 2,3 billones de euros de cara al próximo mercado de verano. Para ello, miran a la Premier League; concretamente, al Liverpool y Manchester City, puesto que los dos principales objetivos son Salah y De Bruyne. Pero al mismo tiempo también buscan incorporar jóvenes talentos, como hicieron el pasado verano con Gabri Veiga.