Durante las deliberaciones, compareció en el Congreso el abogado de Romero, Ernesto Alfredo Parada, quien dijo: “Jamás me imaginé estar acá defendiendo a un inocente, jamás me imaginé cómo era este asunto de estar viviendo la cuestión parlamentaria, porque he de confesar que uno se siente frente al poder y lo único que lo ilumina es el derecho, sin embargo y lo repito nuevamente, me he sentido acogido acá en el palacio desde que he estado asistiendo en relación a este caso. No quisiera seguir sin decir lo siguiente, también me siento como perro amarrado frente a tigre suelto, porque yo no puedo hacer valoraciones de carácter político, yo solo puedo referirme a cuestiones eminentemente técnicas en el ejercicio de la defensa y ahí es donde no puedo ser contestatario y mi defensa se vuelve bastante débil”.