Las víctimas de las inundaciones se refugian en el Centro Estatal de Entrenamiento Deportivo (CETE) en el barrio Menino Deus en Porto Alegre, Brasil. Las autoridades siguen realizando rescates, pero las lluvias complican todo.
Las muertes por las fuertes inundaciones ya superaron las 100 y buscan construir un “corredor humanitario”
Las autoridades trabajan en construir un “corredor humanitario”, según el alcalde de Porto Alegre, Sebastián Melo, un paso temporal entre la urbe y la región metropolitana, un asunto clave para el abastecimiento de la población, ya falta de agua potable.
Por ahora “no falta nada, salvo agua”, pero “para algunos productos usamos stock”, relató a la AFP Roger da Silva, de 36 años, gerente de un supermercado en el municipio de Viamao, al este de Porto Alegre.
“Pedimos alimentos (básicos) como arroz y porotos” pero no llegaron. “El problema es la entrega”, explicó Da Silva.
Por otra parte, el gobierno federal anunció que importará 200.000 toneladas de arroz para garantizar el suministro y evitar especulaciones en el precio, dado que la región inundada abastece de más de dos tercios del arroz que se consume en Brasil.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, lamentó la pérdida de vidas en Brasil en un comunicado y subrayó que desastres como esos son “un recordatorio” de los devastadores efectos de la crisis climática.
Por otra parte, la Confederación Nacional de Municipios dijo que más de 61,000 viviendas resultaron dañadas o destruidas por el agua, una corrección a la baja de la estimación previa de 100,000.
Las pérdidas económicas se estiman en aproximadamente 6,300 millones de reales (USD 1,240 millones). Los daños de escuelas, hospitales y alcaldías suman 351 millones de reales (USD 69 millones).
Tras el cierre por tiempo indeterminado del aeropuerto internacional, la base militar de Canoas recibirá vuelos para el transporte de donaciones y de pasajeros, informó la fuerza aérea.
Los rescates, a pesar de las lluvias, siguen en Porto Alegre.
Las personas se encuentran en los refugios hasta con sus mascotas.
Las personas también están llegando a donar lo necesario para los damnificados.
Personal médico ha llegado desde cada punto del país para brindar ayuda.
Los animales también han sufrido el impacto de las inundaciones.
Las personas buscan cómo refugiarse de las fuertes lluvias.