Tras más de cinco horas de haber iniciado la protesta de pacientes renales, mediante una toma de la carretera CA-5, a la altura de El Durazno, el congestionamiento en la importante vía y el calor pasaron factura a varios manifestantes que tuvieron que recibir atención médica al sufrir desmayos, mientras la crisis parecía no llegar a su final. Al filo de las 11 de la mañana fue habilitado el carril que conduce de la capital a la zona norte de Honduras.
Foto: Andro Rodríguez/ Estalin Irías/EL HERALDO. 09/04/2024 - 10:21