Tegucigalpa, Honduras. “Aquí está ese malnacido, señora ministra. Aquí está ese imbécil haciendo su trabajo, trayendo algodones al Hospital Escuela para que no se paren las cirugías”, dijo este viernes el diputado y precandidato liberal Jorge Cálix al entregar varias cajas de ese insumo.
El diputado y precandidato se refería a la ministra de salud Carla Paredes quien en respuesta a una denuncia de EL HERALDO de que el 26 de noviembre en el Hospital Escuela se suspendieron 20 intervenciones quirúrgicas programadas por falta de algodón profirió una serie de descalificativos.
En su airada respuesta Paredes sostuvo que los medios de comunicación algo tan pequeño lo convierte en noticia y que “hay muchos malnacidos a quienes no les interesa el bienestar del pueblo, solo fastidiarlo”.
Frente a la desidia estatal, Cálix sostuvo que se podría entender que dicen que no hay para quimioterapia que es más complicado, que no se pueden hacer operaciones de corazón abierto, pero que diga que no pueden hacer una operación de apendicitis porque no hay algodón, algo que se puede comprar en una farmacia, es algo absurdo.
Esto es una pequeñez, señora ministra tiene una “pequeña vergüenza, o renuncia de su cargo porque es usted es una funcionaria indolente, además de sinvergüenza y cínica. Y encima tenemos que tragarnos los hondureños que una funcionaria mediocre nos diga malnacidos y nos diga imbéciles”, dijo Cálix.
Aquí está ese “malnacido, señora ministra. Aquí está ese imbécil haciendo su trabajo, trayendo algodones al Hospital Escuela para que no se paren las cirugías, para que no se paren las operaciones, para que los hondureños que realmente necesitan atención sanitaria no nos sigan esperando”
“Estamos hablando de vida, señora ministra. Usted lo que hace es cuidar una chamba. Agarre la mitad del sueldo, del de su hermana, de su cuñado y compre algodones y la otra mitad désela al comandante”, agregó.
Según Cálix, él no maneja fondos públicos, no tiene como ella un jugoso salario, no es funcionario del Poder Ejecutivo, no tiene fondos públicos, ni ha recibido subsidios, ni fondo departamental, pero con el dinero de su familia y su aporte fue a comprar algodón cuando se enteró de la situación en el centro asistencial.
“No conozco a los hondureños que se les suspendieron sus operaciones, pero son seres humanos, son hermanos y por ende aquí estoy. No sé de qué partido son, no sé si tienen, no sé si van a votar o no y no me importa”, agregó.
Para el precandidato liberal, “por indolente, por sinvergüenza, por malcriada” la ministra debe de renunciar, por decirle a “todos los hondureños malnacidos e imbéciles, solo porque nos indigna que se paren las operaciones porque no hay algodón”.
Por otro lado, acerca de la supuesta investigación que el Ministerio Público inició sobre el Fondo Departamental, el congresista manifestó que eso no le preocupaba porque nunca recibió ningún subsidio. “En el pasado nos opusimos al Fondo Departamental ya la manera de entregarlo porque no era equitativo, se lo daba a uno sí ya otro no”.
Actualmente se dan “6.5 millones de lempiras por un diputado propietario, 6.5 millones de lempiras por diputado suplente. No se los da a todos, ojo, verdad, quiero aclarar. Se le da a los de Libre, a los que se agachan, a los que se hincan, a los que juegan con su cinturón”.
No está en contra de que los diputados tengan la posibilidad de llevar proyectos a sus comunidades porque la gente les reclama. No está en contra de eso, pero si en contra de que sea selectivo. ¿Por qué le dan a uno sí ya otro no? Además, tiene que ser transparente. Los hondureños tienen que saber a quién se le dio, cuánto se le dio y en qué se gastó, dijo Cálix.