TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El brutal asesinato del narcotraficante Nery López Sanabria, conocido también como Magdaleno Meza Funez, mientras se encontraba recluido en la cárcel de máxima seguridad El Pozo I, salió a relucir durante la más reciente audiencia en el caso contra el expresidente Juan Orlando Hernández.
En la audiencia, que tuvo lugar el pasado jueves 18 de enero, a solo semanas de que inicie el juicio por tres delitos de narcotráfico contra el exgobernante, la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York hizo mención de dos hondureños que iban a ser llamados a testificar en el caso, pero fueron asesinados en Honduras.
De acuerdo al documento de transcripción de la audiencia, en su página 8, se refiere a ambos crímenes de la siguiente manera: “Dos testigos con información valiosa sobre la conspiración de tráfico de drogas en cuestión en este juicio han sido asesinados en Honduras. Nery López Sanabria, un narcotraficante encarcelado en Honduras, tras incautación de un libro que enumeraba los nombres de Tony Hernández y Juan Orlando Hernández, que se analiza a continuación, fue asesinado en prisión en Honduras”.
La Fiscalía neoyorquina alega que “el asesinato (de Meza) ocurrió poco después de que se admitiera el libro de drogas en el juicio de Tony Hernández”, proceso en el que el exdiputado fue declarado culpable. Asimismo, el documento recoge que “en febrero de 2021, Normando Rafael Lozano, un co-conspirador de Tony Hernández identificado en su juicio, fue asesinado”.
Crimen de Magdaleno Meza
Magdaleno Meza Fúnez fue asesinado el 26 de octubre de 2019, mientras estaba platicando con un miembro de la policía del Instituto Nacional Penitenciario (INP), quien estaba acompañado por lo menos de tres uniformados más.
En ese momento, otro agente abre la puerta e ingresa uno de los reos con pistola en mano y le dispara a Sanabria en la cabeza.
Uno de los reos disparó la pistola contra Magdaleno hasta que se le acabaron las balas, mientras otros dos lo apuñalaron en reiteradas ocasiones.
De acuerdo a las imágenes que se filtraron del crimen, los criminales se aseguraron de que no quedara vivo.
Años atrás, el hombre había fingido su muerte para evitar ser extraditado; sin embargo, tras ser capturado el 6 de junio de 2018, pero en lugar de ser entregado a la justicia de Estados Unidos, fue encarcelado en El Pozo I.
Protección a cuatro testigos
La mención de los nombres de los dos hombres, ya extintos, surgió luego que el Tribunal detallara que “el gobierno también busca imponer medidas protectoras para cuatro de sus testigos”. Aunque señala que el nombre de uno de ellos ya circula en los medios.
“Entonces voy a permitir que los cuatro testigos testifiquen bajo un seudónimo y, número uno, la verdadera identidad será identificada a los demandados, ha sido identificado a los acusados para que puedan investigar y realizar una investigación integral contrainterrogatorio. Y a menos que surja la necesidad, no me parece que necesito informar al jurado que los testigos testifican bajo un seudónimo”.
“Voy a acceder a la petición del gobierno en cuanto a estos cuatro testigos, porque ellos y sus familias enfrentan un grave riesgo de sufrir daños reales por testificar”, agrega el Juez en la audiencia, de acuerdo al documento.
