Estos tanques, conocidos popularmente como chimbos, requieren una serie de cuidados básicos para evitar tragedias como la ocurrida el viernes.
La última información que trascendió, que es un ejemplo de malas prácticas en el uso de los cilindros de gas, revela que algunos vendedores del mayoreo tenían válvulas o conectores ajustados con servilletas, lo que no impide la fuga de gas.
La hermeticidad del tanque, el correcto uso de la válvula y la adecuada manipulación de estos cilindros pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Recomendaciones
1 Al comprar un cilindro de gas, verifique que no tenga fugas ni problemas en la válvula
2 Coloque un poco de agua con jabón en la válvula, si se forma una burbuja entonces hay fuga
3 En caso de fuga, devuelva el cilindro a la distribuidora y cámbielo por otro
4 Verifique que el cilindro tenga el conector o válvula apropiada, hay dos tipos: de cuadrante y redonda
5 Si el adaptador queda flojo no use trapo, plástico o servilleta para ajustarlo porque siempre habrá fuga
6 Realice pruebas periódicas a los cilindros, que pueden ser diariamente, para verificar que no haya fuga
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7 Si desconecta el cilindro todas las noches, no lo deje dentro de su casa, sino en un lugar ventilado
8 Al desconectarlo, hágale la prueba de fuga y si la tiene colóquele un trapo húmedo para que el gas se disipe
9 Verifique en la parte superior cuál es la última fecha de prueba hidrostática o de hermeticidad del chimbo
10 Deseche cualquier tanque cuya última fecha de prueba hidrostática sea anterior a 2010
Además
No acepte cilindros con abolladuras
Si es posible, llene su cilindro en buen estado directamente en la fábrica
Siga su olfato, si siente olor a gas significa que hay fuga.
