El camino expedito para solucionar la polémica que se ha generado en torno al tema de la reelección presidencial en Honduras es un diálogo político transparente, pensando en la patria y al más alto nivel.
Así piensan representantes de algunas organizaciones que no creen que las resoluciones de la Corte Suprema de Justicia en materia jurídica solventen este impasse que se ha generado entre la clase política y los grupos que les siguen.
Para el jurista Enrique Rodríguez Bouchard, secretario general del Consejo Central Ejecutivo del Partido Liberal (CCEPL), lo único que tiene carácter de cosa juzgada es la decisión que tomó la Corte Suprema de Justicia relativa a la despenalización cuando se habla de la reelección presidencial.
“Hay sectores interesados en tratar de confundir a la opinión pública con el afán de promover esta figura de la reelección y entonces han creado una confusión pública y han querido tomar del pelo a la inteligencia del pueblo diciendo que aquel fallo que despenaliza la reelección quiere decir que la reelección está permitida”, dijo.
Por su parte, Julio Cabrera, representante del Foro de la Sociedad Civil, sostiene que “hace falta mucha agua que pase alrededor de esas resoluciones de la Corte Suprema de Justicia”. “Sin duda alguna”, dijo, “se necesita un diálogo al más alto nivel.
Aspiramos como sociedad civil a que hayan conversaciones a la luz de los intereses de Honduras. Conversaciones hay subterráneamente, al estilo de Maquiavelo, pero queremos que hayan conversaciones al estilo de Bergoglio, es decir, conversaciones transparentes para que el pueblo de Honduras pueda tener opciones.
También conversaciones que estén por encima del jefe de Estado de Honduras, o sea los grupos de poder”.
Por su parte, para el abogado y analista político Raúl Pineda, “una cosa es caso juzgado y otra cosa juzgada. En el caso de la sentencia de la Corte no existe cosa juzgada. En derecho existe lo que se llama acción revocatoria, que permite que una sentencia sea sujeto de modificación, en todo caso el tema de esta sentencia ni en lo jurídico ni en lo político pone fin al debate”.
“El debate por su propia naturaleza debe ser llevado a las instancias políticas que corresponde donde deben estar representadas las cuatro fuerzas electoralmente visibles”, sugirió Pineda.
Mientras, el vicepresidente del Congreso Nacional, el nacionalista Miguel Edgardo Martínez, dijo que como la reelección se mantiene abierta e indefinida, el Partido Nacional convocará a un diálogo a las demás fueras políticas para su reglamentación.
