TEGUCIGALPA, HONDURAS
Con dos tipos de medicamentos prestados por el Hospital Mario Catarino Rivas, de San Pedro Sula, el Hospital San Felipe busca solventar la problemática de los pacientes con cáncer.
Al hospital le hacían falta 11 de 42 medicamentos oncológicos. Esa situación ha obligado a los pacientes a comprarlos en farmacias y a otros a retrasar su tratamiento de quimioterapia.
Los pacientes con cáncer denunciaron la semana pasada que hace cuatro meses el hospital no les está brindado su tratamiento.
“Dos medicamentos nos ayudó a gestionarlos el Catarino Rivas porque ellos tienen en su inventario medicamentos, los cuales una droguería nos los está entregando en el transcurso de un mes y nosotros necesitamos darle respuesta a los pacientes lo más antes posible”, afirmó el encargado de farmacia del San Felipe, Marco Ramos.
Sumado a lo anterior, también gestionaron otros seis medicamentos oncológicos y está previsto que ingresen este día a la farmacia. “Hemos adquirido ya la gestión de ocho medicamentos y nos hacen falta tres que esos si los tenemos que gestionar mediante las droguerías”, explicó Ramos.
Eso se debe a que los fármacos se retiraron de la farmacia porque estaban próximos a caducar y se devolvieron a las empresas que los vendieron para que los cambien.
El ministro de Salud, Octavio Sánchez, y las autoridades del hospital sostendrán este día una reunión para gestionar con las droguerías el plazo de entrega de los tratamientos.
Según las cartas de garantía, el plazo para el cambio de los fármacos no puede superar 30 días. Un grupo de pacientes denunció a EL HERALDO que un total de 3,800 frascos de diferentes medicamentos oncológicos se vencieron.
Ramos rechazó esa denuncia y mencionó que los frascos próximos a vencerse eran alrededor de 1,500. A su vez dijo que se entregaron a los proveedores antes de su vencimiento para que se cambien.
La Unidad de Logística de Medicamentos de la Secretaría de Salud es la encargada de realizar compras directas. Los afectados directos son los enfermos con cáncer que urgen de su tratamiento.
Luis Flores, de 63 años, tiene un tumor en la lengua y ha tenido que comprar los medicamentos para sus quimioterapias. El señor se dedica a la agricultura y gracias al apoyo de sus hijos ha podido comprarlos.
Desde la aldea Las Anonas de Comayagua viaja a la capital para que le apliquen su tratamiento.