TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los empleados del Consejo Nacional Electoral (CNE) ya no están trabajando tranquilos en pleno proceso cívico luego de escuchar el anuncio de despidos de parte de la consejera Rixi Moncada.
“Tenemos la obligación de hacer el proceso de reestructuración y, además, está fijada esa obligación con una temporalidad que es de seis meses”, dijo la funcionaria.
Esto quiere decir que una parte de los empleados serían cesanteados y posteriormente contratados solo para un período de seis meses.
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“La Ley Electoral dispone la forma en que debe de operar financieramente la institución”, dijo Moncada.
Aún no se sabe si el resto de consejeros, la liberal Ana Paola Hall y el nacionalista Kelvin Aguirre apoyan la idea de hacer despidos masivos en el ente colegiado.
La mayor parte de los empleados del CNE, si bien fueron contratados por recomendación de sus partidos, son técnicos que han manejado más de cinco procesos electorales.
Cuando llegaron los actuales consejeros nombraron personal adicional hasta tener tres jefes por cada dirección en representación de sus partidos políticos. Por ahora hay casi 200 empleados.
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