TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Al menos 37 hectáreas de bosque afectadas por el gorgojo descortezador es el síntoma que alerta a las autoridades ambientales de que en cualquier momento puede producirse un brote significativo.
Así lo informó a EL HERALDO el director del Instituto de Conservación Forestal (ICF), Luis Edgardo Soliz, quien también manifestó su preocupación ante estos fenómenos que atentan en contra de la flora y fauna nacional.
“Este año se puede desatar un ataque fuerte de gorgojo”, advirtió Soliz, al tiempo que aclaró que “estamos trabajando en un sistema de detección temprana. Han salido brotes de gorgojos, pero los estamos controlando”.
El noreste de Olancho, El Paraíso, Francisco Morazán, Lempira, Choluteca e Intibucá son los departamentos donde se concentra toda la atención debido a que aquí es donde comenzarían a sentirse los efectos nocivos del gorgojo descortezador.
Ante esto, Soliz explicó que se ha hecho una declaratoria de zonas de riesgo de incendios forestales y ataque de plaga de gorgojos.
La plaga se ha querido extender con fuerza, pero solo 37 hectáreas de bosque ha destruido, pormenorizó.
El director del ICF también fue específico al decir que la condiciones climáticas fueron las que alimentaron este latente brote: “Las altas temperaturas y la ausencia de precipitaciones estresaron el bosque”, señaló.
La respuesta
El director de la entidad forestal dijo que con tecnología que se tiene en la actualidad pueden evitar un brote del gorgojo significativo como el registrado en 2014 y 2015, que acabó con más de 500 hectáreas de bosque.
“Tenemos sistema de alertas inmediatas y sistema de detección satelital, además de sobrevuelo con la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) para detectar cualquier brote”, detalló.
El ICF invierte nueve millones de lempiras para evitar la propagación del gorgojo.