TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El fenómeno climatológico El Niño, que durante 2023 y parte de este 2024 afectó la agricultura, ganadería y el sector energético, comienza a despedirse de Honduras previo a la llegada de La Niña.
Las intensas olas de calor y la falta de lluvias provocadas por El Niño serán reemplazadas por las abundantes precipitaciones que producirá La Niña.
“De acuerdo con la última actualización, estamos entrando a la etapa neutra”, explicó Francisco Argeñal, director del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos).
Según el experto, en agosto de este año, La Niña afectará a Honduras. “Es una Niña débil y seguirá siendo débil el resto del año”, añadió.
Las lluvias de este año incrementarán en un 45% en comparación con el año anterior. Incluso, La Niña provocará un enfriamiento en el océano Pacífico, lo que contribuirá a la formación de potentes huracanes.
Desde Cenaos se alertó que para este año se esperan huracanes de la categoría del Mitch de 1998 o incluso peores.
Piden captar agua
Desde Gobernanza Climática de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), ante el panorama de intensas lluvias, instaron a las autoridades a captar toda el agua posible para el tiempo de sequía.
“La última Niña comenzó en 2020 y alimentó los fenómenos Eta y Iota; el gobierno debe tomar medidas contundentes como construir represas”, precisó José Madrigal, director de Gobernanza Climática.
También se instó a la población a tomar medidas preventivas.