TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Mediante un operativo, elementos de la Policía Nacional inspeccionaron varios puestos de ropa usada en Comayagüela con el fin de verificar y contrarrestar la venta de indumentaria ya sea original o similar a la que portan las diferentes unidades policiales.
En los negocios no se encontró vestimenta policial o igual a ella, lo que sí encontraron fue una gran cantidad de indumentaria idéntica a la que usan los militares.
Los precios de las fatigas oscilan entre los precios de 70 a 150 lempiras, mientras los pantalones tácticos entre 100 a 250 lempiras.
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Durante la inspección no se encontró ninguna prenda o uniforme de la Policía Nacional, dijo el director de Comunicación Estratégica de la Secretaría de Seguridad, comisionado Miguel Martínez Madrid.
“Todos los uniformes de la Policía tienen número de serie, código de barra y un chip de registro alfanumérico ligado a la identidad y nombre del policía a quien se le asigna, incluso las botas y las gorras tienen el escudo de la institución. “Esto no ha permitido que los delincuentes usen este uniforme para realizar actos delictivos”, explicó el oficial.
Sobre la venta de indumentaria militar, los dueños de las tiendas aducen que no están cometiendo ningún tipo de delito y que la mayoría de compradores son del rubro de la construcción, ya que la utilizan para realizar trabajos pesados por la calidad de su tela y su protección.
El crimen se viste de militar o policía
En los últimos años en Honduras se ha vuelto común que los delincuentes utilicen uniformes similares a los de los militares y policías, e igual se cubren el rostro con pasamontañas para atracar negocios y cometer horrendas masacres.
Asimismo, se han registrado varios casos de delincuentes capturados cometiendo ilícitos utilizando indumentaria, mayormente, similar a la de los militares.
El uso del uniforme policial o militar ya es penado por la ley. El artículo 473 del Código Penal dice: “Quien sin estar autorizado usa públicamente uniforme, insignias o equipo exclusivamente pertenecientes a los Cuerpos de Seguridad e Investigación del Estado o las Fuerzas Armadas, debe ser castigado con la pena de prisión de dos (2) a cuatro (4) años o multa de doscientos (200) a cuatrocientos (400) días.
La pena a imponer debe ser la de prisión de cuatro (4) a ocho (8) años si el uniforme, insignia o equipo mencionados en el párrafo anterior se emplean para facilitar o encubrir la comisión de un delito. Si tales efectos se poseen con dichos fines, la pena de prisión debe ser de dos (2) a cuatro (4) años”.
En el primer caso, el individuo podría salir libre con el pago de cuatro mil lempiras, ya que la cantidad a pagar es de diez lempiras por día; en el segundo, si el juez es benevolente y solo pone como castigo cinco años, el arrestado también puede quedar libre tras conmutar la pena; pero si se le da arriba de cinco años tendría que ir a prisión.
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