TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Uno de los problemas que tuvo la entidad Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H) y que propicia su cierre fue la relación directa que tuvo con la política, en este caso el Gobierno, consideró Léster Ramírez, asesor legal de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ).
El integrante de la sociedad civil opinó que la institución “terminó capturada por la política y eso implicó que la capacidad técnica no se reconociera, desde los altos mandos se velaron intereses políticos”.
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La Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos (Insep) será quien absorba a Invest y ejecute sus proyectos, por eso “tendrán un gran reto quienes manejen ahora las obras porque había incluso dinero de organismos internacionales ahí”, abonó Ramírez.
“El cierre o cambio de nombre o lo que llegue a pasar era una muerte anunciada”, finalizó. El próximo lunes en consejo de ministros se pretende oficializar la desaparición de la polémica Invest-H.
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