SAN PEDRO SULA, HONDURAS.-24 horas después del caos y disturbios protagonizados por vendedores ambulantes, más de 100 agentes de la Policía resguardan el Palacio Municipal de San Pedro Sula este miércoles 18 de enero..
La extrema seguridad es para evitar enfrentamientos, tal y como ocurró el día anterior cuando en medio de las protestas frente a la municipalidad, al menos 150 trabajadores del ente estatal quedaron encerrados, incluyendo al alcalde de la ciudad, Roberto Contreras.
Este día, al filo del mediodía, los manifestantes mantuvieron bloqueada la tercera avenida por segundo día consecutivo.No obstante una hora después se informó que la protesta se dispersó sin ningún incidente.
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Seis horas de disturbios
Por al menos seis horas, el centro de San Pedro Sula se convirtió en una zona de guerra.
La protesta de un grupo de vendedores ambulantes por supuestos desalojos se salió de control, volviendo un caos el lugar.
La mañana transcurría tranquila en el corazón de la capital industrial, pero en minutos se volvió un caos.
A las 7:00 de la mañana, los vendedores de tres de las seis asociaciones reconocidas en la ciudad se apostaron molestos en la tercera avenida, frente a la catedral.
Según denunciaron, la Policía Municipal y empleados de abastos y mercados llegaron al predio contiguo a la gran terminal de buses supuestamente a colocar piedras, decomisar herramientas y abrir los portones, acción repetida en los últimos días.
Ese predio de la discordia fue donado en la administración de Porfirio Lobo a los buhoneros para construir un mercado y poder reubicarlos.
El terreno estuvo en litigio tras aparecer supuestos dueños demandando a la municipalidad y tras un fallo judicial retornó a la ciudad.
La actual administración municipal ha dicho que no es prioridad construir un mercado en ese terreno, lo que llevó a los vendedores a limpiar el terreno para instalarse en el sitio.
La acción generó reacciones de parte de las autoridades, quienes recibieron denuncias de que no era únicamente una limpieza sino venta de parcelas de parte de la dirigencia.
Ante esa situación, la policía municipal realizó operativos en el predio para colocar piedras y otras acciones.
Luego procedió a desalojar puestos frente a la Universidad del Valle de Sula decomisando la mercadería, según la dirigencia.
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Horas de caos
Estos dos puntos llevaron a vendedores del Sindicato Nacional de Comerciantes del Sector Informal de Honduras (Sincosih); de la Asociación de Vendedores Ambulantes de Mercadería y Alimentos (Asevamalih) y del Sindicato de Vendedores Libres, de Mercado, Ferias, Estacionarios de Honduras (Sivelefesh), a llevar a cabo la protesta.
La semana anterior ejecutaron una acción similar en el bulevar del sur por el mismo motivo.
Al plantón llegaron agentes de la Policía Nacional quienes les manifestaron, según la dirigente Claudia Pineda, que si el problema era con la municipalidad que fueran a protestar al atrio pero no en la avenida porque interrumpían el tráfico, eso generó que cambiaran de lugar y comenzaran a gritar consignas y denunciar los atropellos de los que según ellos han sido objeto.
Pasaron unos minutos y el desorden comenzó. Los vendedores empezaron a quemar llantas frente a la municipalidad y gritaban al alcalde que diera la cara.
Elementos de la Policía Municipal y Nacional rodearon el palacio municipal mientras los empleados permanecían adentro. Posteriormente, un grupo de vendedores con palos y piedras recorrían las calles del centro advirtiendo a los comerciantes que cerraran los negocios y no podían abrirlos.
Se armó un caos y la economía en el centro se paralizó, dejando pérdidas grandes.Mientras eso transcurría en el parque central, por la puerta del Palacio Municipal que da a la primera calle la seguridad del alcalde lo sacaba del edificio.
Hubo de todo, empujones, gritos, insultos y luego apareció la tanqueta ingresando al parque central.
El vehículo no sirvió para desalojar a nadie, solo para apagar las llamas de las llantas, lo que perfectamente pudo realizar una cisterna de bomberos.
“Abrimos la tienda a las 8:30 AM, como siempre lo hacemos, pero minutos más tarde llegó un grupo de muchachos a pedirnos que cerremos”, relató Carlos, quien trabaja en una tienda comercial de la tercera avenida.
El hombre, que prefirió omitir su apellido, contó que “al principio los manifestantes llegaron tranquilos, pero a otros comerciantes los obligaron a cerrar sus puertas a la fuerza”.
Transcurrían las horas y la situación empeoraba, la policía resguardaba mientras los vendedores seguían en protesta.“Esto es demasiado, no pueden agredirnos ni quitarnos la mercadería y no vamos a desistir si no hay diálogo”, repetía Fredy Núñez, presidente del Sivelefesh.
Núñez se enfrentó a la Policía argumentando agresiones de parte de los uniformados a una de sus compañeras.
En otro extremo del parque, y en medio del humo y el calor propio de la ciudad, los vendedores recordaron las promesas del alcalde en campaña y el repetido apoyo a los emprendedores que les iba a dar.
“Nosotros no estamos vendiendo terrenos como nos acusan, esas firmas de esos recibos no son nuestras y antes de actuar de esa forma deben investigar”, dijo Pineda.
Muchos negocios despacharon a sus empleados y decidieron cerrarlos esperando que hoy sea un mejor día y puedan recuperar lo perdido ayer.La calma retornó al centro, la Policía permaneció resguardando el Palacio Municipal y los restos de la batalla campal vivida en horas de la mañana se observaban por doquier. Los vendedores esperaban el llamado para el diálogo.
Los dirigentes aceptan que el centro es un desorden y aducen que hay más de 12,000 vendedores en las calles y avenidas. La propuesta de los buhoneros es seguir en las calles y hacer un ordenamiento conjunto.
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¿Cuál es el conflicto?
El conflicto viene arrastrándose desde el mandato del expresidente Porfirio Lobo Sosa, quien les donó a los vendedores ambulantes un terreno para construir un mercado y poder reubicarlos.
El terreno estuvo en litigio tras aparecer supuestos dueños demandando a la municipalidad y tras un fallo judicial retornó a la ciudad.
El alcalde de San Pedro Sula, Roberto Contreras, dijo que para constuir el “Mega mercado” en ese terreno se ocupan al menos 1,500 millones de lempiras y ni la ciudad ni el gobierno tienen esa cantidad de dinero.
Además, denunció que la presidenta del Sindicato Nacional de Comerciantes del Sector Informal de Honduras (Sincosih), Claudia Pineda, y el dirigente del Sindicato de Vendedores Libres de Mercado, Ferias, Estacionarios de Hondura (Sivelefesh), Fredy Núñez, impulsan las manifestaciones porque quieren adueñarse de la tierra.
El edil también reveló que se están realizando investigaciones por la venta ilegal de predios por 50 mil lempiras.
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