TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los resultados de las pruebas PCR que se realizó el microbiólogo Julio César Licona para saber si tenía Covid-19 todavía no han llegado a las manos de sus familiares quienes exigen respuestas.
Así lo informó Gabry Licona, hermano del microbiólogo a EL HERALDO, quien junto a la familia están demandando a las autoridades que sean transparente, ante el descuido con el abnegado microbiólogo que estuvo en la primera línea de la pandemia.
El lunes pasado el microbiólogo que tenía 22 años de laborar en el Hospital Escuela de la capital perdió la vida en su apartamiento del barrio El Bosque, mientras cumplía la cuarentena al padecer la enfermedad supuestamente.
El 25 de mayo pasado Licona se practicó la prueba de PCR, pero nunca recibió los resultados y mucho menos el tratamiento, solo tomó acetaminofén para aliviar los malestares que sentía.
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Negligencia
Su hermano declaró que la primera prueba sigue extraviada y hasta ayer el 5 de junio no sabían si resultó positiva o negativa. Tampoco las autoridades se han comunicado con ellos.
Ahora están a la espera de los resultados de la segunda prueba, que se realizó a inicios de la semana, cuando fue encontrado muerto por lo cual esperan que los resultados estén listos el miércoles próximo y saber la verdad.
“Como familia queremos que las cosas sean lo más claro posible, porque creemos que hubo negligencia en su tratamiento, con el simple hecho que al final sus mismos compañeros fueran a como a recogerlo”, lamentó.
La muerte del especialista causó consternación entre sus amigos, familiares, compañeros de trabajo y entre los hondureños, debido a que su cuerpo estuvo por 24 horas abandonado, porque no hacían el levantamiento.
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