TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La Organización de Jóvenes Miskitus DIWAT expresó su “rotundo rechazo a la construcción de una cárcel de alta seguridad en el territorio ancestral de Gracias a Dios”.
“Consideramos que este proyecto representa una grave amenaza a nuestros derechos humanos, a nuestra cultura y a nuestro medio ambiente”, expresaron en un pronunciamiento.
El Consejo Nacional de Defensa y Seguridad (CNDS) anunció en junio pasado que se construirá un centro de reclusión para 20,000 reos entre Gracias a Dios y Olancho.
Para DIWAT, este proyecto es ilegal porque violenta el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre pueblos indígenas -al no ser consultados sobre la iniciativa-, la declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas y la Constitución de la República.
En ese sentido, la organización sostiene que el presidio violará los derechos del pueblo misquito, destruirá el medio ambiente y dejará impactos sociales negativos.