GLASGOW, ESCOCIA.- Durante su participación en la
Conferencia de Naciones Unidas Sobre el Cambio Climático (COP26) el presidente
Juan Orlando Hernández recordó a la comunidad internacional la deuda ambiental que tiene con el planeta y, sobre todo, con los países que a pese a su baja emisión de contaminación son de los más afectados por los efectos del cambio climático, como es el caso de Honduras.
Añadió que, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), las catástrofes acontecidas en el país son sin precedentes a causa del cambio climático y “nos dejan un fuerte impacto económico en pérdidas, de casi 6,000 millones de dólares; 22,000 muertos, 11,000 desaparecidos y que afectan la vida de millones de familias hondureñas que lo pierden todo. Deciden emigrar por efecto del cambio climático”.
Hernández detalló que “como resultado de estos huracanes, y sin considerar los terribles efectos económicos de la pandemia, los daños y pérdidas fueron de 2,100 millones de dólares, que equivalen al 9.2% del Producto Interno Bruto (PIB) y no lo digo yo… lo dice la Comisión Económica de América Latina, a quien encomendamos hacer el estudio del impacto en el país”.
Por otro lado, El presidente destacó que Honduras no solo enfrenta lluvias cada vez más destructivas, sino sequías extremas que obligan a las familias a perder sus cultivos y que profundizan la pobreza, “nos afectan duras y prolongadas sequías. Vemos las dos caras del cambio climático”, acotó.
El gobernante expresó que entre los años 2014 y 2021 la sequía generó pérdidas económicas anuales por 453 millones de dólares, equivalentes a 1,7% del PIB del país, lo que provocó además inseguridad alimentaria y nutricional de la población con una situación que se debe atender también regularmente.
Y destacó que según un informe presentado por el G20, 'los países más ricos de la tierra producen aproximadamente el 80% de la emisión de dióxido de carbono o contaminación ambiental. Sin embargo, Honduras sufre las consecuencias de esta contaminación, siendo de los países más vulnerables del mundo y no sumamos a la causa de contaminación ambiental mundial', por lo que solicitó mayor apoyo para el país y a quienes tiene una cuota de responsabilidad por la crisis comenzar a actuar de forma consciente y responsable.
De igual manera, aprovechó para cuestionar la finalidad de este tipo de cumbres, donde según él, falta pasar de la palabra a la acción, pues el tiempo corre y con él el daño es cada vez más irreversible.
“¿Cómo podemos prosperar si cada año nuestros avances económicos y desarrollo social son consumidos por la emergencia ambiental? Es frustrante venir a estas cumbres y tantas otras y ver que seguimos igual o peor. Hoy me pregunto: ¿Por qué, mientras nos sentamos aquí en las mismas cumbres del cambio climático y hablamos de teorías, no vemos resultados concretos?”, manifestó.
“El G20, ayer en Roma, Italia, determinó que los países más ricos de la tierra producen aproximadamente el 80% de la emisión de dióxido de carbono o contaminación ambiental. Sin embargo, Honduras sufre las consecuencias de esta contaminación, siendo de los países más vulnerables del mundo y no sumamos a la causa de contaminación ambiental mundial”, citó.
Prosiguió: “Y en la región somos de los que más reservas naturales tenemos. Hoy los hondureños estamos cumpliendo más de lo que se solicita en el combate contra el cambio climático, con nuestras ambiciosas contribuciones nacionales determinadas (NDC) recién actualizadas”.
Su participación finalizó con un mensaje de exhortación a los presentes: “Tengo fe, tengo esperanza, que estos eventos dejarán de ser para lucir bien ante la comunidad internacional y ante los pueblos del mundo, porque ahora es nuestra última oportunidad de que esta cumbre sea realmente algo efectivo, menos palabras y más acciones. Repito, como se dice en Honduras: la esperanza es lo último que se pierde”, subrayó.
En el desarrollo de su discurso el mandatario hondureño sustentó su posición con cifras alarmantes del daño sufrido en los últimos 50 años, tiempo en el que más de 80 fenómenos han golpeado el territorio, algunos de ellos, dejando daños que hasta la fecha no han podido ser superados.
“¿Dónde está la compensación ambiental que tanto ha prometido la comunidad internacional?”, preguntó Hernández, al tiempo que dijo que “la esperanza es lo último que se pierde”, en alusión al cambio que se debe implementar para revertir los daños o evitar que se siga deteriorando el planeta, pues de no parar, seguirán aumentando los desastres naturales cada vez más destructivos, como los dos huracanes Eta y Iota, que en menos de 15 días devastaron a Honduras el año pasado.
VEA: Sin hogar, sin empleo y sin ayuda: una familia que sufre la crisis de Eta y Iota (FOTOS)
Honduras, de los más afectados por el cambio climático
En la presencia de más de 200 líderes del mundo en la COP26, el gobernante hondureño indicó que “en mi país, Honduras, desde el año 1970 hasta el 2020 se han registrado 82 desastres naturales, de los cuales 67 fueron influenciados por los efectos del cambio climático”.Añadió que, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), las catástrofes acontecidas en el país son sin precedentes a causa del cambio climático y “nos dejan un fuerte impacto económico en pérdidas, de casi 6,000 millones de dólares; 22,000 muertos, 11,000 desaparecidos y que afectan la vida de millones de familias hondureñas que lo pierden todo. Deciden emigrar por efecto del cambio climático”.
ADEMÁS: BCIE: 'Bono del Cambio Climático va dirigido a familias en pobreza extrema'
Además, apuntó que solo en 2020 Honduras, mientras vivía uno de los momentos más críticos a causa de la pandemia de covid 19, en menos de 15 días recibió el impacto de dos huracanes, Eta y Iota, que dejaron un impacto que se traduce en pérdida de vidas humanas, infraestructura, empleos, etc.
Hernández detalló que “como resultado de estos huracanes, y sin considerar los terribles efectos económicos de la pandemia, los daños y pérdidas fueron de 2,100 millones de dólares, que equivalen al 9.2% del Producto Interno Bruto (PIB) y no lo digo yo… lo dice la Comisión Económica de América Latina, a quien encomendamos hacer el estudio del impacto en el país”.
Por otro lado, El presidente destacó que Honduras no solo enfrenta lluvias cada vez más destructivas, sino sequías extremas que obligan a las familias a perder sus cultivos y que profundizan la pobreza, “nos afectan duras y prolongadas sequías. Vemos las dos caras del cambio climático”, acotó.
El gobernante expresó que entre los años 2014 y 2021 la sequía generó pérdidas económicas anuales por 453 millones de dólares, equivalentes a 1,7% del PIB del país, lo que provocó además inseguridad alimentaria y nutricional de la población con una situación que se debe atender también regularmente.
LE PUEDE INTERESAR: L 1,600 millones darán por 'bono climático' en Honduras
Actuar ante el daño
El titular del Ejecutivo planteó: “¿Se imaginan qué significa para países como Alemania, Estados Unidos o Reino Unido perder el 9.2% de su PIB? Se los digo: 350 billones para Alemania, 1.926 billones para USA y 242,7 billones para Reino Unido”. “Entonces, comparemos: hemos perdido durante 50 años casi 6,000 millones de dólares, y esperamos recibir apenas una mínima cantidad. Pregunto: ¿Es justo esto? ¿Dónde está la compensación ambiental que tanto ha prometido la comunidad internacional?”, preguntó.Y destacó que según un informe presentado por el G20, 'los países más ricos de la tierra producen aproximadamente el 80% de la emisión de dióxido de carbono o contaminación ambiental. Sin embargo, Honduras sufre las consecuencias de esta contaminación, siendo de los países más vulnerables del mundo y no sumamos a la causa de contaminación ambiental mundial', por lo que solicitó mayor apoyo para el país y a quienes tiene una cuota de responsabilidad por la crisis comenzar a actuar de forma consciente y responsable.
De igual manera, aprovechó para cuestionar la finalidad de este tipo de cumbres, donde según él, falta pasar de la palabra a la acción, pues el tiempo corre y con él el daño es cada vez más irreversible.
“¿Cómo podemos prosperar si cada año nuestros avances económicos y desarrollo social son consumidos por la emergencia ambiental? Es frustrante venir a estas cumbres y tantas otras y ver que seguimos igual o peor. Hoy me pregunto: ¿Por qué, mientras nos sentamos aquí en las mismas cumbres del cambio climático y hablamos de teorías, no vemos resultados concretos?”, manifestó.
“El G20, ayer en Roma, Italia, determinó que los países más ricos de la tierra producen aproximadamente el 80% de la emisión de dióxido de carbono o contaminación ambiental. Sin embargo, Honduras sufre las consecuencias de esta contaminación, siendo de los países más vulnerables del mundo y no sumamos a la causa de contaminación ambiental mundial”, citó.
Prosiguió: “Y en la región somos de los que más reservas naturales tenemos. Hoy los hondureños estamos cumpliendo más de lo que se solicita en el combate contra el cambio climático, con nuestras ambiciosas contribuciones nacionales determinadas (NDC) recién actualizadas”.
Su participación finalizó con un mensaje de exhortación a los presentes: “Tengo fe, tengo esperanza, que estos eventos dejarán de ser para lucir bien ante la comunidad internacional y ante los pueblos del mundo, porque ahora es nuestra última oportunidad de que esta cumbre sea realmente algo efectivo, menos palabras y más acciones. Repito, como se dice en Honduras: la esperanza es lo último que se pierde”, subrayó.
VEA TAMBIÉN: Cuña de alta presión seguirá dejando lluvias en varios sectores de Honduras