OLANCHO, HONDURAS.- Las fuertes lluvias registradas en el departamento de Olancho han incrementado los niveles en la represa hidroeléctrica Patuca III y está a punto de provocar inundaciones en varias comunidades cercanas del municipio de Patuca.
El embalse tiene una capacidad de 290 metros de agua, pero ayer alcanzaba los 287.58 metros, a 2.42 metros para que empiece a rebalsar.
El otro problema es que personal de mantenimiento no podía ingresar a la represa para hacer descargas programadas, ya que hace cuatros días pobladores de comunidades vecinas mantenían tomada la carretera de acceso. La protesta obedeció a que el gobierno no ha cumplido con compromisos acordados con los pobladores afectados desde el 2011.
La comisión interventora de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) emitió un comunicado solicitando a los expropietarios de las tierras que ahora ocupa el espejo de agua de Patuca III desistir de las medidas de presión para no afectar la operatividad del embalse.
“No se pueden operar las compuertas radiales que controlan el nivel del embalse, las que no solo garantizan su seguridad operativa, sino también prevenir inundaciones descontroladas aguas abajo del embalse”, explicó Granly Lobo, jefe de unidad de la central Patuca III.
Los pobladores que tenían sus tierras y que fueron expropiadas para instalar el proyecto hidroeléctrico reclaman los compromisos que firmaron con autoridades de la ENEE y que no se han cumplido.
Estos acuerdos incumplidos tienen que ver con la indemnización de tierras a 16 familias.
Además, no se ha ejecutado la electrificación de las comunidades vecinas, la construcción de una subestación de energía en Patuca, la pavimentación de un tramo carretero alterno hacia donde se encuentra las turbinas de la represa ni la instalación de un sistema de alerta temprana para las comunidades aguas abajo, entre otras exigencias.
El miércoles, Lobo informó que una comisión dialogó con los manifestantes, quienes suspendieron la toma y los trabajadores pudieron ingresar.
