CORTÉS, HONDURAS.- En los centros de salud se agotaron los medicamentos, las pulperías ya no cuentan con más alimentos y la mayoría de la gente se baña en las aguas sucias del río Ulúa.
Obtener agua para beber y raciones de comida es un lujo que solo los valientes y los pocos con dinero se pueden dar.
Ese es el escenario en las aldeas Protección y Tibombo, en los bajos del municipio de Choloma, cuyos habitantes enfrentaban una escasez de varios días tras quedar incomunicados por la crecida del río Ulúa.
+Piden evacuación inmediata a los pobladores de la ribera del río Guayape en Olancho
Pero el miércoles los vecinos de Protección recibieron un hilo de esperanza, luego de que un equipo de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) movilizara el helicóptero presidencial para llevar raciones de granos básicos, víveres y agua a esta población.
Ante la llegada de la ayuda, los habitantes salieron de sus casas para recibir los alimentos y cargarlos sobre sus espaldas mediante una cadena humana compuesta por niños, jóvenes y adultos, para trasladarlos a sus humildes casas.
Mientras que a unos 25 minutos de Protección, en la aldea Tibombo, elementos militares se movilizaron por tierra firme para entregar comida y agua.
VEA: Al menos 3,000 hondureños que residen en Florida están en riesgo por el huracán Ian
Incomunicados
En la aldea Protección los hombres se movilizan en lanchas o nadando, arriesgando su vida para cruzar hacia Urraco Pueblo y traer lo suficiente que les permita subsistir junto a sus familias.
Desde hace dos semanas todos los hombres de la comunidad se unieron para colocar sacos cargados de arena sobre los bordos que rodean a Protección y así evitar inundaciones.
En Tibombo y Poza del Riel aplicaron la misma medida, más no en Lupo Viejo, otra aldea que conforma este bloque bananero, cuyas moradas están casi sumergidas.
Ante la incertidumbre y el temor, los vecinos duermen en los bordos en covachas improvisadas para vigilar que el agua no rebalse e inunde sus casas. Hay monitoreos las 24 horas del día por parte de los varones.
LEA: Incomunicados por emergencia de lluvias están en calamidad y urgen de atención
También está por estallar una crisis sanitaria, pues ya hay reportes de menores y adultos con infecciones en la piel y problemas respiratorios. Las embarazadas y los recién nacidos viven una pesadilla no solo por la ola de zancudos que se ha revuelto en el sitio, sino también porque carecen de leche, pañales, agua y comida.
Ante ello, la Alcaldía de Choloma se ha convertido en pieza angular para atender urgentemente a las familias afectadas. La corporación ha sumado esfuerzos logísticos y humanos para llegar hasta los últimos rincones y auxiliar a las familias que claman ayuda mientras la muerte los acecha.
“Con el esfuerzo del alcalde y todo un equipo hemos atendido a estas comunidades, principalmente a Tibombo y Protección, las más grandes y que están incomunicadas. Solo en Protección se está apoyando a unas 1,400 personas y a más de 700 en la aldea de Tibombo”, precisó Roberto Sánchez, quien funge como coordinador del comité de emergencia municipal. “Afortunadamente hemos podido llegar también vía aérea, queríamos llegar a más, a los más necesitados, porque hay que gente que tiene días de no beber agua”, apuntó.
ADEMÁS: Se perdieron cultivos en al menos 12 departamentos por fuertes torrenciales