Tegucigalpa, Honduras
Con la captura en Costa Rica y la posible extradición a Estados Unidos del supuesto narcotraficante Wilter Blanco Ruiz, las agencias antidrogas, nacionales y extranjeras, dan pasos firmes en el desbaratamiento de una megaestructura que lidera el narcotráfico en Honduras.
Según los agentes antidrogas, esta gran organización criminal estaría conformada por políticos, personajes al interior de la Corte Suprema de Justicia, jueces, fiscales, policías, militares y empresarios, la mayoría de ellos con expedientes investigativos, unos ya concluidos y otros todavía abiertos y en proceso de documentación.
Perfil
Blanco Ruiz, de 39 años de edad y originario de Brus Laguna, departamento de Gracias a Dios, comenzó a levantar un imperio de la droga en todo el litoral atlántico a finales de los 90. Esto llamó la atención de las agencias antidrogas de Estados Unidos, quienes desde 1999 comenzaron a darle seguimiento.
Para el 2005 ya era un hombre millonario, con muchas propiedades y empresas. Poco a poco se volvió temido y con su dinero comenzó a controlar a muchos operadores de justicia del país.
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Llegó a manejar una cuadrilla de altos oficiales de la Policía que le llamaban “jefe”.
Las investigaciones sobre su relación con policías, jueces, escribientes, secretarias y fiscales consta en el oficio DGPN-UAIPN-No.0056-2010 de la Unidad de Análisis de Inteligencia Policial, el cual hace referencia al expediente judicial número TSTC-71-2008, que se refiere al caso del robo de 502 kilos de supuesta cocaína en las playas del municipio de Balfate, Colón, y que presuntamente eran propiedad de Blanco Ruiz.
El hecho lleva al día sábado 9 de diciembre de 2006 cuando los miembros de la Policía Nacional celebraban la cena navideña en un restaurante del lugar, organizada por un subinspector y jefe regional de la Dirección General de Investigación Criminal, “y financiada por el ciudadano Winter Neptalí Blanco Ruiz”.
A la fiesta acudió casi toda la cúpula policial. Mientras Blanco Ruiz y la cúpula policial y demás operadores de justicia departían plácidamente, otros atrevidos policías le arrebataban 502 kilos de droga. De esta cantidad, 300 kilos los llevaron para la Policía de La Ceiba y se la entregaron a una mujer para que la trasladara a Copán, donde fue recuperada.
Furioso, Blanco Ruiz llamó y ordenó al general de Policía que ordenara a los agentes de la DNIC la devolución de los otros 202 kilos de droga restantes, orden que fue cumplida de inmediato.
Los policías que le quitaron la droga a Blanco Ruiz fueron enjuiciados y para los primeros pasos del proceso judicial se trasladó de Tegucigalpa a Colón, en uno de los helicópteros de la Policía, a una jueza pariente de uno de los oficiales vinculados al capo, dice el informe.
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Escurridizo
En los últimos cinco años, Blanco Ruiz se volvió un hombre escurridizo, aunque algunos investigadores que lo perseguían lo ubicaban en occidente, en la costa norte y en la comunidad de Palacios, en la gran Mosquitia.
En abril de 2015, sorpresivamente, la DLCN comenzó a incautarle los bienes y ha continuado realizando las confiscaciones.
El círculo contra Blanco Ruiz fue cerrándose a partir del momento en que la Embajada de Estados Unidos lo puso en un listado como investigado por narcotráfico, incomoda porque el 14 de septiembre de este año fue detenido por la Policía en un retén en Colón y fue dejado libre.
