TEGUCIGALPA, HONDURAS.-El diputado liberal Fredy Renán Nájera Montoya se retractó y solicitó a la Corte Federal del Distrito Sur de Nueva York que se anule el acuerdo de culpabilidad que había firmado a finales de 2018.
Nájera es acusado de conspirar para ingresar al menos cinco kilogramos de cocaína a Estados Unidos y de usar y portar ametralladoras en el tráfico de drogas.
El hondureño a través de su abogado Joaquín Pérez remitió una petición ante la Corte el sábado anterior y está a la espera de que los jueces puedan admitirla a su favor.
Si los jueces aceptan la petición, la sentencia que estaba programada para el 21 de junio se aplazaría.
Lea: Los políticos hondureños salpicados por escándalos de narcotráfico
En un inicio, Nájera expresó sus dudas sobre declararse culpable dado su desacuerdo con el abogado Rocha, a quien dijo que “lo odiaba”.
En la moción, el abogado defensor del hondureño dejó plasmado que el acuerdo de culpabilidad fue “inducido por coerción que se obtuvo injustamente o dado por temor o inadvertencia y, por lo tanto, es involuntario e inconsistente con el debido proceso de ley”.
En el documento se explica que Nájera se vio presionado por su abogado anterior, Víctor Rocha, para que se declarara culpable de los cargos.
Además, que el exdefensor entró en un conflicto de interés con el narcotraficante hondureño Wilter Blanco, a quien también representaba en una Corte de Miami.
Vea aquí: Cúpula policial planificó y asesinó al zar antidrogas
8de diciembre de 2009, fueasesinado el director de la Lucha contra el Narcotráfico, Julián Arístides González Irías, en las cercanías del barrio El Guanacaste de Tegucigalpa. |
“Uno de los reclamos más poderosos del gobierno de EE UU contra el señor Nájera es su presunta responsabilidad en la muerte del general Arístides González. El principal testigo del gobierno en este caso, Devis Leonel Rivera, planeaba declarar que Nájera persuadió a otros conspiradores sobre la necesidad de silenciar a González”, detalla la moción.
Sobre este extremo, “la opinión de Nájera es que no tuvo nada que ver con la planificación o ejecución del asesinato. En cambio, el asesinato fue llevado a cabo por otros traficantes, particularmente Wilter Blanco, pero como el abogado Rocha estaba trabajando bajo un conflicto de intereses debido a su representación de Blanco, él no hizo ningún esfuerzo por investigar, obtener informes o asegurar testigos para desafiar la versión del gobierno
del asesinato”.
Lea: Las jugosas ganancias que deja el narcotráfico en su paso hacia Estados Unidos
El documento señala que informes policiales, incluyendo grabaciones de audio generadas por la Fiscalía General de Honduras y la justicia hondureña, afirman que la incautación de 143 kilos de cocaína de Wilter Blanco había sido la causa del asesinato del zar antidrogas Arístides González.
El comentario del abogado Rocha sobre este hecho es que “mi cliente Wilter Blanco ha dicho que no está presente, pero él no quiere testificar. Él no desea testificar. No puedo obligarlo a testificar. Eso sería poco ético forzarlo o pedirle incluso que testifique”.
A juicio del abogado Joaquín Pérez, “la Corte agravó el problema al concluir que no hay razón para creer que ninguno de estos testigos incluyendo, a Wilter Blanco será una fuente de evidencia exculpatoria sobre el asesinato del general González”.
El problema no era la voluntad de Wilter Blanco de declarar, sino más bien si una investigación ha revelado evidencia que socava la credibilidad de Rivera Maradiaga al sugerir que había fabricado o implicado injustamente al señor Nájera.
Nájera se entregó voluntariamente a la justicia de Estados Unidos el 12 de marzo de 2018. Entre ese día y el 5 de julio, las partes intentaron alcanzar un acuerdo de cooperación, sin embargo, fracasó.
El crimen del zar antidroga está en |
La evidencia que apunta a Wilter Blanco como el culpable habría logrado tres propósitos: impugnar el testimonio de Rivera Maradiaga sobre quién participó en la planificación y ejecución del asesinato; mostrar la existencia de una disputa bien documentada que explica la motivación de Rivera Maradiaga para implicar a Nájera; y que entre todos los narcotraficantes conocidos en Honduras, el señor Nájera era el menos propenso a la violencia y, por lo tanto, un objetivo más fácil de implicar sin temor a represalias.
El documento indica que el testimonio del cachiro sobre el papel Nájera en el crimen del zar antidrogas, es la única evidencia probatoria que lo incriminen en el tráfico de drogas y más específicamente en los delitos relacionados al uso de armas.
Lea aquí: Julián González Irías, el hombre que combatió férreamente el narcotráfico en Honduras
Devis Leonel Rivera aseveró que Nájera instigó que debería ejecutarse el crimen del general González porque estaba interfiriendo con destruir las pistas de aterrizaje y de apoderarse de sus propiedades en el área de Olancho.
Y estas aseveraciones, de acuerdo al abogado de Nájera, “lo pintaron como un individuo violento”.
El 8 de diciembre de 2009, fue asesinado el director de la Lucha contra el Narcotráfico, Julián Arístides González Irías, en las cercanías del barrio El Guanacaste de Tegucigalpa.
El crimen del zar antidroga está en completa impunidad en el país, pese a que se sabe quienes ordenaron y quienes ejecutaron su asesinato.
El capo Devis Rivera dijo en una Corte de Nueva York que habían pagado unos 300 mil dólares para acabar con la vida de González