TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Dolor, cansancio, desesperación, lágrimas y luto: esas son las palabras que describen la caravana de migrantes que viaja hacia Estados Unidos en busca de un mejor futuro.
En menos de un mes de camino -desde el 13 de octubre que salieron desde San Pedro Sula, al norte de Honduras- son tres las víctimas mortales, que viajaban en la caravana, y que no alcanzaron su sueño por una vida mejor.
Las imágenes son totalmente desgarradores, en especial al saber que huían de la pobreza, la violencia y la falta de empleo, pero en el camino encontraron la muerte.
1. El pasado 20 de octubre las autoridades guatemaltecas confirmaron el primer deceso de un hondureño. Se trataba de German Ramírez Rivera, quien falleció al caer de un vehículo en movimiento.
El hondureño, que viajaba junto a la caravana, se había subido en la parte trasera de un carro pick up, pero en el trayecto se soltó y murió de forma inmediata, convirtiéndose en el primer inmigrante en perder la vida.
El cuerpo del hondureño quedó tirado en medio de una calle de Guatemala.
2. Dos días después, el 22 de octubre, el joven Melvin Josué Gómez Escobar perdió la vida al caer de un tráiler en Tapachula, México.
Según las autoridades, el hondureño se había subido al vehículo pesado junto a otros emigrantes, pero se soltó y cayó al duro asfalto.
Los cuerpos de ambas víctimas ya fueron repatriados a Honduras, donde sus familiares les dieron cristiana sepultura.
Al igual que la primera víctima mortal, Melvin Josué Gómez perdió la vida al caer de un tráiler.
3. Henry Adalid Díaz Reyes es la tercera víctima mortal que viajaba en la segunda caravana migrante a Estados Unidos.
El joven falleció el domingo 28 de octubre después de recibir el impacto de una bala de goma en un enfrentamiento entre policías y migrantes en la frontera de Guatemala y México.
El compatriota le había dicho a su tía que a Honduras solo regresaba muerto, sin saber que sería un presagio.
El joven aún no ha sido repatriado, pero las autoridades afirmaron que realizan las gestiones para hacerlo lo antes posible.
El joven Henry Adalid le había dicho a su tía que solo regresaría a Honduras muerto.
En menos de un mes de camino -desde el 13 de octubre que salieron desde San Pedro Sula, al norte de Honduras- son tres las víctimas mortales, que viajaban en la caravana, y que no alcanzaron su sueño por una vida mejor.
Las imágenes son totalmente desgarradores, en especial al saber que huían de la pobreza, la violencia y la falta de empleo, pero en el camino encontraron la muerte.
1. El pasado 20 de octubre las autoridades guatemaltecas confirmaron el primer deceso de un hondureño. Se trataba de German Ramírez Rivera, quien falleció al caer de un vehículo en movimiento.
El hondureño, que viajaba junto a la caravana, se había subido en la parte trasera de un carro pick up, pero en el trayecto se soltó y murió de forma inmediata, convirtiéndose en el primer inmigrante en perder la vida.
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2. Dos días después, el 22 de octubre, el joven Melvin Josué Gómez Escobar perdió la vida al caer de un tráiler en Tapachula, México.
Según las autoridades, el hondureño se había subido al vehículo pesado junto a otros emigrantes, pero se soltó y cayó al duro asfalto.
Los cuerpos de ambas víctimas ya fueron repatriados a Honduras, donde sus familiares les dieron cristiana sepultura.
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3. Henry Adalid Díaz Reyes es la tercera víctima mortal que viajaba en la segunda caravana migrante a Estados Unidos.
El joven falleció el domingo 28 de octubre después de recibir el impacto de una bala de goma en un enfrentamiento entre policías y migrantes en la frontera de Guatemala y México.
El compatriota le había dicho a su tía que a Honduras solo regresaba muerto, sin saber que sería un presagio.
El joven aún no ha sido repatriado, pero las autoridades afirmaron que realizan las gestiones para hacerlo lo antes posible.
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