De acuerdo con las informaciones, el militar ingresó al lugar donde se encontraba la compatriota esperando su turno para solicitar asilo en los Estados Unidos y, acto seguido, apuntó a la mujer y a otras personas, incluyendo niños, con su arma.
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'Estábamos terminando de comer cuando uno de los agentes (infante de marina) entró apuntando a todos los que estábamos en el albergue y, sin importarle que había niños ahí presentes, me apuntaron con el arma diciendo que podía matarnos ahí mismo si quería, que si a él se le daba la gana nos podía matar y no había ningún problema solo por ser centroamericanos', contó la catracha Karen Martínez.
La mujer tiene tres hijos y salió del país en una de las caravanas migrantes con la intención de ingresar a los Estados Unidos.
Por su parte, Pueblos sin Fronteras culpó al gobierno del país azteca por ese tipo de hechos. 'Responsabilizamos al nuevo gobierno mexicano por criminalizar la ayuda humanitaria, la defensa de los derechos humanos y las mismas personas migrantes'.