El agente de policía Garrett Rolfe fue acusado de asesinato el miércoles, cinco días después de haber matado a un joven afroestadounidense, Rayshard Brooks, en un drama que reavivó la indignación contra los comportamientos racistas en el país.
'Es una situación terrible, pero no podemos oponer resistencia a un policía', dijo Trump en esta entrevista con Fox News. 'Espero que (el agente) tenga un juicio justo, porque la policía ha sido injustamente tratada en nuestro país', dijo.
'Pero de nuevo: no pueden ofrecer resistencia de esa manera ante un policía. Comenzaron a disputarse y miren cómo terminó. Muy mal. Muy mal', dijo Trump.
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Rayshard Brooks, un padre de familia negro de 27 años, murió después de que un policía blanco le disparara dos veces por la espalda en un aparcamiento en Atlanta. El agente, de 27 años, quería detener a Brooks por estar ebrio en la vía pública.
Un video mostró que tras haberle disparado, el policía le dio una patada cuando ya estaba en el suelo desangrándose.
La muerte de Brooks ocurre tres semanas después de la de George Floyd, asfixiado por un policía que lo inmovilizó en el suelo tras su detención, en Minneapolis, lo que provocó una ola de manifestaciones antirracistas y contra la violencia policial que traspasaron las fronteras de Estados Unidos.
El martes, Trump anunció que prohibía técnicas policiales como la inmovilización por asfixia, salvo en casos en que la vida del agente de la policía corra peligro, y ordenó una reforma limitada de las fuerzas del orden.
