NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.- La crisis del coronavirus se agravó aún más en
Arizona el jueves y el gobernador de
Texas dio marcha atrás después de encabezar uno de los esfuerzos más agresivos del país para la
reactivación económica, mientras el número de contagios diarios confirmados en todo
Estados Unidos se acercó al punto máximo registrado durante los oscuros días de finales de abril.
Si bien el aumento de pruebas de diagnóstico quizá sea un factor en el incremento de casos, los expertos advierten que otras métricas indican que el virus está regresando. Las muertes diarias, las hospitalizaciones y el porcentaje de pruebas que dan positivo a covid-19 también han aumentado en semanas recientes en algunas zonas del país, especialmente en el sur y el oeste.
En Arizona, el 23% de las pruebas de diagnóstico realizadas en los últimos siete días han dado positivo, cerca del triple del promedio nacional, y una cantidad récord de 415 pacientes se encuentra conectada a respiradores. En Mississippi, el conteo diario de nuevos casos a nivel estatal alcanzó su máximo nivel dos veces esta semana.
“No es una broma. Van a suceder cosas realmente malas”, declaró el secretario de Salud de Mississippi, Thomas Dobbs.
El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, cuyo estado fue de los primeros en reactivar la economía, suspendió nuevas medidas y restableció una prohibición de cirugías electivas en algunas áreas a fin de que los hospitales cuenten con camas suficientes luego que el número de pacientes en el estado superó el doble de los reportados hace dos semanas. Por su parte, el gobernador de Nevada estableció el uso obligatorio de cubrebocas en espacios públicos, incluyendo casinos de Las Vegas.
“Lo ultimo que queremos como estado es ir hacia atrás y tener que cerrar negocios”, dijo Abbott.
Estados Unidos registró 34,500 casos de covid-19 el miércoles, ligeramente menos que el día anterior pero aún cerca del récord diario de 36,400, reportados el 24 de abril, de acuerdo con un conteo de la Universidad Johns Hopkins. El promedio diario ha aumentado en más de 50% en las últimas dos semanas, según un análisis de The Associated Press.
Los expertos subrayan que el incremento en casos podría traducirse en un preocupante aumento de muertes en todo Estados Unidos dependiendo de una serie de factores, entre ellos el que las autoridades estatales tomen las decisiones correctas.
Los fallecimientos diarios en Estados Unidos vinculados a la pandemia rondan los 600 luego de haber alcanzado cerca de 2,200 a mediados de abril.
“Es posible, si jugamos mal nuestras cartas y cometemos muchos errores, que regresemos a ese nivel. Pero si somos inteligentes no hay razón para tener 2.200 muertes diarias”, afirmó el doctor Ashish Jha, director del Instituto de Salud Global de Harvard.
Sin embargo, advirtió que “hemos desestimado constantemente este virus”.
Varios estados establecieron récord de casos para un periodo de 24 horas, incluyendo Arizona, California, Nevada, Texas y Oklahoma.
El virus ha cobrado más de 122,000 vidas en Estados Unidos —la mayor cifra del mundo— y más de 2,3 millones de contagios han sido confirmados a nivel nacional.
En la mayoría de la gente, el nuevo coronavirus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas. En algunas personas, sobre todos los adultos mayores y las que padecen trastornos de salud subyacentes, puede provocar enfermedades más graves, como la neumonía, e incluso la muerte.
Si bien el aumento de pruebas de diagnóstico quizá sea un factor en el incremento de casos, los expertos advierten que otras métricas indican que el virus está regresando. Las muertes diarias, las hospitalizaciones y el porcentaje de pruebas que dan positivo a covid-19 también han aumentado en semanas recientes en algunas zonas del país, especialmente en el sur y el oeste.
En Arizona, el 23% de las pruebas de diagnóstico realizadas en los últimos siete días han dado positivo, cerca del triple del promedio nacional, y una cantidad récord de 415 pacientes se encuentra conectada a respiradores. En Mississippi, el conteo diario de nuevos casos a nivel estatal alcanzó su máximo nivel dos veces esta semana.
“No es una broma. Van a suceder cosas realmente malas”, declaró el secretario de Salud de Mississippi, Thomas Dobbs.
El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, cuyo estado fue de los primeros en reactivar la economía, suspendió nuevas medidas y restableció una prohibición de cirugías electivas en algunas áreas a fin de que los hospitales cuenten con camas suficientes luego que el número de pacientes en el estado superó el doble de los reportados hace dos semanas. Por su parte, el gobernador de Nevada estableció el uso obligatorio de cubrebocas en espacios públicos, incluyendo casinos de Las Vegas.
“Lo ultimo que queremos como estado es ir hacia atrás y tener que cerrar negocios”, dijo Abbott.
Estados Unidos registró 34,500 casos de covid-19 el miércoles, ligeramente menos que el día anterior pero aún cerca del récord diario de 36,400, reportados el 24 de abril, de acuerdo con un conteo de la Universidad Johns Hopkins. El promedio diario ha aumentado en más de 50% en las últimas dos semanas, según un análisis de The Associated Press.
Los expertos subrayan que el incremento en casos podría traducirse en un preocupante aumento de muertes en todo Estados Unidos dependiendo de una serie de factores, entre ellos el que las autoridades estatales tomen las decisiones correctas.
Los fallecimientos diarios en Estados Unidos vinculados a la pandemia rondan los 600 luego de haber alcanzado cerca de 2,200 a mediados de abril.
“Es posible, si jugamos mal nuestras cartas y cometemos muchos errores, que regresemos a ese nivel. Pero si somos inteligentes no hay razón para tener 2.200 muertes diarias”, afirmó el doctor Ashish Jha, director del Instituto de Salud Global de Harvard.
Sin embargo, advirtió que “hemos desestimado constantemente este virus”.
Varios estados establecieron récord de casos para un periodo de 24 horas, incluyendo Arizona, California, Nevada, Texas y Oklahoma.
El virus ha cobrado más de 122,000 vidas en Estados Unidos —la mayor cifra del mundo— y más de 2,3 millones de contagios han sido confirmados a nivel nacional.
En la mayoría de la gente, el nuevo coronavirus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas. En algunas personas, sobre todos los adultos mayores y las que padecen trastornos de salud subyacentes, puede provocar enfermedades más graves, como la neumonía, e incluso la muerte.