Nairobi, Kenia
Las lluvias torrenciales que cayeron sobre Nairobi, la capital de Kenia, causaron al menos 17 muertos, diez de ellos al derrumbarse un edificio de seis plantas, informaron este sábado fuentes oficiales.
'Diez cadáveres fueron recuperados' tras el derrumbe del edificio, ayer viernes por la noche, y 80 heridos fueron atendidos en hospitales, declaró el ministro del Interior, Joseph Kkaissery. En total más de 120 personas fueron hospitalizadas desde el viernes.
Decenas de supervivientes fueron sacados de entre los escombros el sábado de madrugada. Uno de ellos permaneció más de diez horas bloqueado por los cascotes.
La portavoz de la Cruz Roja, Arnolda Shiundu, dijo que el drama se produjo cuando un edificio de seis plantas se vino abajo, el viernes hacia las 21H30 (18H30 GMT), en el barrio de Huruma, en el noreste de la capital de Kenia, azotada por un temporal.
Las fuertes lluvias provocaron inundaciones y deslaves en numerosos lugares de Nairobi.
'Nuestros equipos de rescate se encuentran en las zonas (afectadas), en las que el caos es total', declaró por la noche la portavoz de la Cruz Roja.
Según ella, 150 viviendas se vieron afectadas por el derrumbe del inmueble.
'El edificio se desplomó por las fuertes lluvias, pero queda por determinar si se cumplieron todas las normativas durante su construcción' hace dos años, advirtió el vicegobernador de Nairobi, Jonathan Mueke, quien anunció una investigación sobre lo ocurrido.
La prensa local afirma que el edificio se halla cerca de un río.
Además, dos edificios de las inmediaciones fueron declarados 'peligrosos' el sábado, y se desalojó a los ocupantes.
Las inundaciones también mataron a otras siete personas, dos de las cuales se ahogaron cuando su vehículo fue arrastrado por las aguas en la zona industrial de la capital y otras cuatro por la caída de un muro que delimitaba una propiedad, precisó Koome.
Varios edificios se derrumbaron en los últimos años en Nairobi y en otras ciudades de Kenia, en pleno boom inmobiliario.
La calidad de los materiales y la velocidad a la que se construye suelen ser criticados.
El desarrollo de la clase media en el país ha provocado una explosión de la demanda de viviendas, lo que disparó los precios.
Las lluvias torrenciales que cayeron sobre Nairobi, la capital de Kenia, causaron al menos 17 muertos, diez de ellos al derrumbarse un edificio de seis plantas, informaron este sábado fuentes oficiales.
'Diez cadáveres fueron recuperados' tras el derrumbe del edificio, ayer viernes por la noche, y 80 heridos fueron atendidos en hospitales, declaró el ministro del Interior, Joseph Kkaissery. En total más de 120 personas fueron hospitalizadas desde el viernes.
Decenas de supervivientes fueron sacados de entre los escombros el sábado de madrugada. Uno de ellos permaneció más de diez horas bloqueado por los cascotes.
La portavoz de la Cruz Roja, Arnolda Shiundu, dijo que el drama se produjo cuando un edificio de seis plantas se vino abajo, el viernes hacia las 21H30 (18H30 GMT), en el barrio de Huruma, en el noreste de la capital de Kenia, azotada por un temporal.
Las fuertes lluvias provocaron inundaciones y deslaves en numerosos lugares de Nairobi.
'Nuestros equipos de rescate se encuentran en las zonas (afectadas), en las que el caos es total', declaró por la noche la portavoz de la Cruz Roja.
Según ella, 150 viviendas se vieron afectadas por el derrumbe del inmueble.
'El edificio se desplomó por las fuertes lluvias, pero queda por determinar si se cumplieron todas las normativas durante su construcción' hace dos años, advirtió el vicegobernador de Nairobi, Jonathan Mueke, quien anunció una investigación sobre lo ocurrido.
La prensa local afirma que el edificio se halla cerca de un río.
Además, dos edificios de las inmediaciones fueron declarados 'peligrosos' el sábado, y se desalojó a los ocupantes.
Las inundaciones también mataron a otras siete personas, dos de las cuales se ahogaron cuando su vehículo fue arrastrado por las aguas en la zona industrial de la capital y otras cuatro por la caída de un muro que delimitaba una propiedad, precisó Koome.
Varios edificios se derrumbaron en los últimos años en Nairobi y en otras ciudades de Kenia, en pleno boom inmobiliario.
La calidad de los materiales y la velocidad a la que se construye suelen ser criticados.
El desarrollo de la clase media en el país ha provocado una explosión de la demanda de viviendas, lo que disparó los precios.