WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS.-La medida anunciada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aparte de beneficiar a los cónyuges de los ciudadanos estadounidenses, también lo hará para los “Dreamers” y beneficiarios en general del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés).
A través de un comunicado, la Casa Blanca detalló que estas acciones en pro de los migrantes facilitarán el proceso de visa para los graduados universitarios de Estados Unidos.
“El anuncio de hoy permitirá que las personas, incluidos los beneficiarios de DACA y otros “Dreamers”, que hayan obtenido un título en una institución de educación superior acreditada en Estados Unidos, y que hayan recibido una oferta de empleo de un empleador estadounidense en un campo relacionado con su título, reciban visas de trabajo de forma más rápida y segura”, detalla el comunicado compartido por la Casa Blanca.
El gobierno del presidente Biden asegura que “reconociendo que es de nuestro interés nacional garantizar que aquellas personas que se han educado en los EE.UU. puedan utilizar sus habilidades y educación para beneficiar a nuestro país, la Administración está tomando medidas para facilitar la tramitación de las visas de empleo para aquellos que se han graduado de la universidad y tienen una oferta de trabajo que exige candidatos altamente calificados, incluidos los beneficiarios de la DACA y otros ‘Dreamers’”.
Plan migratorio de Joe Biden
Joe Biden anunció reformas destinadas a simplificar la obtención de la residencia o de un permiso de trabajo a cientos de miles de migrantes, como los cónyuges de estadounidenses y los graduados en universidades locales, incluidos los “dreamers”, aquellos que entraron a Estados Unidos siendo niños.
Con este cambio, los inmigrantes sin permiso de residencia casados con estadounidenses, además de sus hijos, podrán conseguirlo sin tener que salir del país para solicitarlo.
El Gobierno calcula que cerca de 500.000 inmigrantes, además “de unos 50.000 hijastros de ciudadanos estadounidenses”, podrán acogerse a la nueva normativa.
Las autoridades revisarán caso por caso todas las solicitudes. Aquellos que reciban la aprobación dispondrán de tres años para pedir la residencia permanente, un plazo en el que podrán quedarse en Estados Unidos y optar a un permiso de trabajo de hasta tres años.
Una vez conseguida la residencia permanente, también conocida como tarjeta verde, el beneficiario puede solicitar la ciudadanía.
“Lo que anunciamos son procesos potencialmente simplificados” para “minimizar la burocracia, minimizar las dificultades que crea tener que abandonar el país”, explicó un funcionario que pidió el anonimato a periodistas antes del anuncio.