CIUDAD DE GUATEMALA, GUATEMALA- Estados Unidos quiere incrementar la emisión de visas para trabajos agrícolas temporales a ciudadanos de
Guatemala como medida para frenar la migración ilegal desde esa nación centroamericana, informaron el lunes los gobiernos de ambos países.
En un comunicado conjunto, Washington y Guatemala anunciaron que trabajan en un acuerdo para priorizar el programa de empleos temporales o estacionales agrícolas para guatemaltecos en territorio estadounidense por medio de la visa H-2A, que incluye un registro de Reclutadores de Trabajadores Extranjeros.
'Al regular a los Reclutadores de Trabajadores Extranjeros en Guatemala, el gobierno de Estados Unidos y el gobierno de Guatemala están incrementando las protecciones para quienes buscan oportunidades de empleo legal en Estados Unidos, logrando un objetivo prioritario para Guatemala y mitigando un importante factor de migración irregular a Estados Unidos', señaló el texto.
'Con este acuerdo, el gobierno de Estados Unidos priorizaría las citas de visa H-2A antes de otras categorías de visa de no inmigrante para los guatemaltecos', agregó, según el comunicado emitido en inglés.
El proyecto es parte de las acciones para 'encontrarle soluciones de fondo' a la migración ilegal, dijo a periodistas el presidente guatemalteco, Jimmy Morales, durante una visita a un hospital en el oeste del país.
El embajador estadounidense en Guatemala, Luis Arreaga, que acompañó a Morales, señaló que en 2018 Estados Unidos otorgó 9,000 visas de trabajo temporal a guatemaltecos y ahora se busca 'cómo expandir ese programa'.
'Buscamos cómo permitir la migración legal y esa sería una de las formas', dijo.
El anuncio se produce una semana después de que Morales pospuso sin fecha una reunión en la Casa Blanca con su par estadounidense Donald Trump, en medio de los esfuerzos de Washington para frenar la llegada de indocumentados a territorio estadounidense, la mayoría centroamericanos.
Morales suspendió la cita luego de que la Corte Constitucional guatemalteca decidió que cualquier acuerdo para convertir a Guatemala en un tercer país seguro para migrantes solicitantes de asilo debía ser aprobado primero por el Congreso.
Según trascendió, Morales y Trump iban a firmar un pacto en ese sentido, por el cual la nación centroamericana tendría que tramitar los pedidos de asilo de todos los migrantes que pasaran por su territorio en su marcha hacia el norte, un flujo que se ha incrementado notablemente desde octubre pasado.
Hasta ahora el gobierno de Morales ha negado que esa fuera la intención de la reunión con Trump, pese a que funcionarios guatemaltecos habían reconocido negociaciones con Estados Unidos.
En un comunicado conjunto, Washington y Guatemala anunciaron que trabajan en un acuerdo para priorizar el programa de empleos temporales o estacionales agrícolas para guatemaltecos en territorio estadounidense por medio de la visa H-2A, que incluye un registro de Reclutadores de Trabajadores Extranjeros.
'Al regular a los Reclutadores de Trabajadores Extranjeros en Guatemala, el gobierno de Estados Unidos y el gobierno de Guatemala están incrementando las protecciones para quienes buscan oportunidades de empleo legal en Estados Unidos, logrando un objetivo prioritario para Guatemala y mitigando un importante factor de migración irregular a Estados Unidos', señaló el texto.
'Con este acuerdo, el gobierno de Estados Unidos priorizaría las citas de visa H-2A antes de otras categorías de visa de no inmigrante para los guatemaltecos', agregó, según el comunicado emitido en inglés.
El proyecto es parte de las acciones para 'encontrarle soluciones de fondo' a la migración ilegal, dijo a periodistas el presidente guatemalteco, Jimmy Morales, durante una visita a un hospital en el oeste del país.
El embajador estadounidense en Guatemala, Luis Arreaga, que acompañó a Morales, señaló que en 2018 Estados Unidos otorgó 9,000 visas de trabajo temporal a guatemaltecos y ahora se busca 'cómo expandir ese programa'.
'Buscamos cómo permitir la migración legal y esa sería una de las formas', dijo.
El anuncio se produce una semana después de que Morales pospuso sin fecha una reunión en la Casa Blanca con su par estadounidense Donald Trump, en medio de los esfuerzos de Washington para frenar la llegada de indocumentados a territorio estadounidense, la mayoría centroamericanos.
Morales suspendió la cita luego de que la Corte Constitucional guatemalteca decidió que cualquier acuerdo para convertir a Guatemala en un tercer país seguro para migrantes solicitantes de asilo debía ser aprobado primero por el Congreso.
Según trascendió, Morales y Trump iban a firmar un pacto en ese sentido, por el cual la nación centroamericana tendría que tramitar los pedidos de asilo de todos los migrantes que pasaran por su territorio en su marcha hacia el norte, un flujo que se ha incrementado notablemente desde octubre pasado.
Hasta ahora el gobierno de Morales ha negado que esa fuera la intención de la reunión con Trump, pese a que funcionarios guatemaltecos habían reconocido negociaciones con Estados Unidos.