Un falso sacerdote es acusado por la comunidad de Cúcuta, en el departamento de Norte de Santander, Colombia, de utilizar 'agua bendita' para drogar y abusar sexualmente de varias niñas.
El impostor, quien fue identificado como G ermán Restrepo Quinterose, se ganó la confianza de la comunidad que asistía a la iglesia Jesús de la Buena Esperanza de Cúcuta diciendo que también era médico por lo que creó un grupo de semilleros para niñas menores de edad.
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Según las víctimas que brindaron su testimonio a la fiscalía, el sacerdote les obligaba a beber una supuesta agua bendita, para ingresar al semillero.
Sin embargo, la bebida en realidad era un tipo de droga que el hombre utilizaba para que perdieran el conocimiento y posteriormente abusar sexualmente de ellas.
'Él utiliza un agua de vida… muchas de ellas decían que se sentían mareadas y ahí era donde él aprovechaba para abusar de ellas. Mi hija fue víctima de este señor y pido justicia. Esto está en manos de la Fiscalía, pido que lo capturen', relató una de las madres de las víctimas a una radio local.
Tras los señalamientos contra el supuesto líder religioso, la diócesis de Cúcuta y la Arquediócesis de Bogotá investigaron al párroco y aclararon que este nunca ha pertenecido a la Iglesia Católica.
'Él pertenece a una congregación que se llama CRE, una iglesia ortodoxo-cristiana', dijo el vicario general de la Diócesis de Cúcuta, padre Israel Bravo Cortés.
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