FLORIDA, ESTADOS UNIDOS.- La
Cámara de Representantes de Florida aprobó una iniciativa republicana que ordena a las agencias policiales cooperar con las autoridades federales de inmigración y q
ue prohíbe las políticas de 'ciudades santuario' que protegen a los inmigrantes detenidos.
Después de un largo debate durante dos días, los legisladores aprobaron la propuesta el miércoles por votación de 69-47 y la turnaron al Senado, donde está pendiente una iniciativa similar.
No hay una definición oficial de “ciudad santuario”, pero a menudo significa que una ciudad coopera poco —o no lo hace— con las autoridades federales de inmigración en cuanto a la persecución de personas que viven en Estados Unidos sin autorización.
Florida no tiene 'ciudades santuario' como otros estados. El proyecto de ley, impulsado por el representante republicano Cord Byrd, prohibiría esas políticas y obligaría a las agencias policiales locales a acatar las solicitudes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE por sus siglas en inglés) de que mantengan detenida a alguna persona para deportarla.
'Les damos la bienvenida. Sólo les pedimos algo muy simple: que acaten nuestras leyes y nuestras normas', declaró Byrd.
La Unión Americana de Libertades Civiles recomendó a los inmigrantes no venir a Florida ante el riesgo de que sean detenidos, y hubo protestas en el estado en contra de la medida. Los demócratas no lograron suavizar la iniciativa o incluirle excepciones, y acusaron a los republicanos que impulsaron la medida de perseguir a los inmigrantes para sacar provecho político en momentos que el presidente Donald Trump ha convertido el combate a la inmigración en parte central de su gobierno.
Muchos demócratas, como la representante Dotie Joseph, citaron pasajes de la Biblia sobre cómo tratar a los extranjeros y dar la bienvenida a los inmigrantes.
'Se nos enseña a amar a los extranjeros en nuestra tierra. Se supone que no debemos maltratar ni oprimir a los extranjeros entre nosotros', declaró Joseph, quien es haitiana-estadounidense.
'Los inmigrantes no vienen para causar terror ni convertir este lugar en un lugar horrible. Vienen porque ésta es la tierra de las oportunidades', agregó la demócrata Anika Omphroy, de antepasados haitianos y jamaiquinos.
Sin embargo, los republicanos rechazaron las críticas de que la medida sea antiinmigrante y xenófoba.
'El proyecto de ley no busca echar a los ilegales del estado de Florida. Busca proteger a los ciudadanos del estado de Florida', dijo el representante republicano Michael Caruso.
Además de obligar a la cooperación con las autoridades federales, la medida permitiría suspender o destituir a los funcionarios locales que autoricen políticas santuario, e imponerles multas de hasta 5.000 dólares diarios.
Una propuesta similar fue aprobada el año pasado en la Cámara de Representantes, pero la versión del Senado no fue sometida a votación. La medida al parecer tiene este año el impulso suficiente para conseguir la aprobación final en ambas cámaras.
Después de un largo debate durante dos días, los legisladores aprobaron la propuesta el miércoles por votación de 69-47 y la turnaron al Senado, donde está pendiente una iniciativa similar.
No hay una definición oficial de “ciudad santuario”, pero a menudo significa que una ciudad coopera poco —o no lo hace— con las autoridades federales de inmigración en cuanto a la persecución de personas que viven en Estados Unidos sin autorización.
Florida no tiene 'ciudades santuario' como otros estados. El proyecto de ley, impulsado por el representante republicano Cord Byrd, prohibiría esas políticas y obligaría a las agencias policiales locales a acatar las solicitudes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE por sus siglas en inglés) de que mantengan detenida a alguna persona para deportarla.
'Les damos la bienvenida. Sólo les pedimos algo muy simple: que acaten nuestras leyes y nuestras normas', declaró Byrd.
La Unión Americana de Libertades Civiles recomendó a los inmigrantes no venir a Florida ante el riesgo de que sean detenidos, y hubo protestas en el estado en contra de la medida. Los demócratas no lograron suavizar la iniciativa o incluirle excepciones, y acusaron a los republicanos que impulsaron la medida de perseguir a los inmigrantes para sacar provecho político en momentos que el presidente Donald Trump ha convertido el combate a la inmigración en parte central de su gobierno.
Muchos demócratas, como la representante Dotie Joseph, citaron pasajes de la Biblia sobre cómo tratar a los extranjeros y dar la bienvenida a los inmigrantes.
'Se nos enseña a amar a los extranjeros en nuestra tierra. Se supone que no debemos maltratar ni oprimir a los extranjeros entre nosotros', declaró Joseph, quien es haitiana-estadounidense.
'Los inmigrantes no vienen para causar terror ni convertir este lugar en un lugar horrible. Vienen porque ésta es la tierra de las oportunidades', agregó la demócrata Anika Omphroy, de antepasados haitianos y jamaiquinos.
Sin embargo, los republicanos rechazaron las críticas de que la medida sea antiinmigrante y xenófoba.
'El proyecto de ley no busca echar a los ilegales del estado de Florida. Busca proteger a los ciudadanos del estado de Florida', dijo el representante republicano Michael Caruso.
Además de obligar a la cooperación con las autoridades federales, la medida permitiría suspender o destituir a los funcionarios locales que autoricen políticas santuario, e imponerles multas de hasta 5.000 dólares diarios.
Una propuesta similar fue aprobada el año pasado en la Cámara de Representantes, pero la versión del Senado no fue sometida a votación. La medida al parecer tiene este año el impulso suficiente para conseguir la aprobación final en ambas cámaras.