MALINDI, KENIA.- Alrededor de 58 tumbas hallaron las autoridades en una parcela de tierra de más de 300 hectáreas en el condado de Kilifi, a unos 400 kilómetros al sureste de Nairobi, Kenia.
Las primeras hipótesis indican que estaban en una propiedad del líder de la Iglesia Internacional de las Buenas Nuevas, Paul Mackenzie, quien fue detenido para ser investigado tras darle la instrucción de morir de hambre a cientos de seguidores.
La semana pasada cerca del mismo lugar las autoridades rescataron a 15 seguidores de un culto cristiano que creían que irían al cielo si morían de hambre.
“Ni siquiera hemos excavado la superficie, lo que da una clara indicación de que es probable que obtengamos más cuerpos al final de este ejercicio”, indicó una fuente policial anónima a AFP.
En marzo, Mackenzie fue arrestado por incitar a unos padres a asfixiar y matar de hambre a sus dos hijos, pero puesto en libertad bajo una fianza de 700 dólares.
Luego, volvieron a arrestarlo el 15 de abril tras descubrir los cuerpos de cuatro de sus seguidores. Seis de sus cómplices también fueron detenidos.
“Este pastor tendrá que enfrentar todos estos cargos a pesar de que se ha declarado en huelga de hambre diciendo que está rezando y ayunando bajo custodia”, señaló una fuente policial.
El hecho recuerda el mayor suicidio en masa de la historia ocurrido en 1978, cuando al menos 900 personas ingirieron cianuro en Jonestown, una comunidad religiosa en Guyana creada por el reverendo estadounidense Jim Jones.
La policía sigue buscando cuerpos y más evidencias.