TOKIO, JAPÓN.- El primer ministro japonés, Fumio Kishida, anunció este jueves un plan de ayudas a las familias de 25,000 millones de dólares, con el que quiere atajar la caída de la natalidad en el país.
El plan, que durará tres años, prevé un aumento de las ayudas directas a los progenitores, ayuda financiera para la educación de los hijos y los cuidados prenatales y la promoción de horarios de trabajo flexibles, así como de un permiso parental para los padres.
Las medidas buscan hacer frente al desplome de la tasa de natalidad, que cayó a un piso “sin precedentes”, y “aumentar los ingresos de los jóvenes y de la generación en edad de criar niños”, declaró Fumio Kishida en una reunión con ministros, expertos y empresarios.
Japón, que cuenta con 125 millones de habitantes, registró menos de 800,000 nacimientos en 2022, el número más bajo desde que hay estadísticas. Al mismo tiempo ha aumentado la proporción de personas mayores en la demografía del archipiélago.
El plan suscitó críticas, ya que de momento no se precisaron las fuentes de financiación.