Ginsburg, de 87 años, una de los cuatro jueces liberales de los nueve que conforman la máxima corte estadounidense, afirmó que no planea dejar sus funciones 'mientras pueda hacer el trabajo a pleno ritmo'.
'Sigo siendo completamente capaz de hacer esto', dijo en un comunicado.
LEA: Exreina de belleza en EEUU es condenada por mensajes sexuales con un menor
Pese a que un tratamiento con inmunoterapia para las lesiones en su hígado no tuvo éxito, dijo que la quimioterapia está dando 'resultados positivos'.
La salud de Ginsburg es observada de cerca, pues en caso de que dejara sus funciones (por la enfermedad o por deceso) el gobierno del presidente Donald Trump buscaría nombrar un juez que incline al tribunal a un terreno más conservador.
Los jueces de la Corte Suprema se mantienen en sus cargos hasta que mueren o se retiran voluntariamente, y Ginsburg se ha aferrado a su posición a pesar de su edad, consciente de que si se va podría cambiar el panorama legal del país.
Ginsburg ha sufrido al menos tres episodios previos de cáncer en las últimas dos décadas, incluido un cáncer de colon y otro de pulmón.
ADEMÁS: EEUU sanciona a Juan Carlos Ortega, hijo del presidente de Nicaragua
La magistrada dijo que una biopsia en febrero había revelado lesiones en su hígado y comenzó la inmunoterapia en mayo. Al ver que no dio resultados, se trató con quimioterapia.
'Mi evaluación más reciente el 7 de julio indicó una reducción significativa de las lesiones hepáticas y ninguna enfermedad nueva', indicó Ginsburg.