KFAR AZA, ISRAEL.- Un alto oficial del ejército israelí relató este viernes que encontró el cuerpo de un bebé decapitado en uno de los kibutz atacados por el movimiento palestino Hamás el 7 de octubre.
El coronel Golan Vach, jefe del servicio militar de búsqueda y rescate, dijo a la AFP que vio el cadáver de una madre que protegía a un bebé en el kibutz Beeri, tres días después de los ataques, que según las autoridades israelíes dejaron al menos 1.400 muertos, en su mayoría civiles.
“Cuando me detuve, vi a un bebé decapitado. Lo levanté con mis manos y lo cargué, y lo puse en la bolsa para cadáveres. Lo hice yo personalmente”, afirmó durante un punto de prensa organizado por los militares en otro kibutz.
En el asalto sin precedentes lanzado por los islamistas palestinos desde la Franja de Gaza en territorio israelí fueron tomadas como rehenes 229 personas cuando los milicianos atacaron kibutz, pueblos y bases militares, según cifras de las autoridades israelíes.
Israel informó que muchos de los muertos son mujeres y niños, sin dar cifras.
Hamás negó que sus combatientes mataran a bebés durante su incursión. Este movimiento palestino que gobierna la Franja de Gaza reportó que 7.326 personas, incluyendo 3.038 niños, han muerto en los bombardeos israelíes de represalia desde el 7 de octubre.
“La gente me pregunta ‘¿cómo es que no tomaste una foto?’. Les digo: ‘Lo siento, tengo hijos. Tengo limitaciones. Tengo límites. Yo no le tomo una foto de un bebé decapitado”, indicó Vach a los periodistas en el kibutz Kfar Aza, una granja colectiva de 700 personas que también fue atacada por Hamás.
Las acusaciones de que hubo decapitaciones de niños emergieron en la prensa israelí y fueron respaldadas en un primer momento por autoridades israelíes, aunque después varios portavoces afirmaron que estos hechos no podían confirmarse.